La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF)ha denunciado que los fallos e incidencias en el nuevo sistema de gestión de las tramitaciones de solicitudes de subsidios por desempleo, ALMA, están provocando retrasos significativos en la concesión de estas ayudas a nivel asistencial por parte del SEPE, el Servicio Público de Empleo Estatal.
En un comunicado publicado en su página web, CSIF asevera que el nuevo sistema, implantado a finales de 2024 con motivo de las reformas en los subsidios y la creación de una pasarela al Ingreso Mínimo Vital, está resultando manifiestamente ineficaz e ineficiente desde su inicio.
Estos fallos e incidencias están afectando a todas las oficinas del SEPE de forma generalizada, según CSIF, que especifica que "la aplicación presenta fallos e incidencias constantes que retrasan significativamente la tramitación de expedientes, frente a las aplicaciones informáticas anteriores".
Manuel Galdeano, coordinador nacional de CSIF, ha informado de que ALMA "sigue dificultando y ralentizando la gestión de expedientes", algo que se lleva produciendo desde hace siete meses y que, durante todo este tiempo ha ido "prolongando excesivamente los tiempos de tramitación en comparación con las aplicaciones anteriores, y comprometiendo el adecuado servicio a la ciudadanía".
CCOO cifró el retraso en 150.000 subsidios
Hace unas semanas, Comisiones Obreras (CCOO) ya alzó la voz ante los fallos en ALMA y cifró en 150.000 los subsidios por desempleo que aún no se habían pagado a sus beneficiarios por los errores en la aplicación y una situación de escasez de personal agravada ante la falta de reposición de personal.
En este caso, CCOO se refería a los nuevos subsidios reconocidos con el Complemento de Ayuda al Empleo, el CAE, puesto en marcha el pasado 1 de abril y que se destina a personas que perciben sueldos en determinados casos contemplados por la ley.
En ese momento, CCOO estimó en 5.000 los trabajadores necesarios para paliar una situación de "colapso", aproximadamente el 70% de la plantilla actual del SEPE.
Una plantilla escasa y envejecida
En ese sentido, CSIF ha lamentado que el SEPE haya perdido el 31% de su plantilla en los últimos 10 años y que, además, el 56% de su actual plantilla supere los 50 años (con el 20% a punto de jubilarse), lo que hace urgente la renovación del personal.
"Esta carencia se traduce en que el 52% de sus unidades de atención directa al público están infradotadas, especialmente en Barcelona, Girona, Lleida, Madrid, Cáceres, Badajoz, Bizkaia, Álava, Baleares, Alicante y Almería, donde muchas oficinas tienen solo de 1 a 5 empleados y 11 de ellas están sin personal", denuncia el sindicato.