
En un momento en el que la UE trata de impulsar el gasto en defensa, el papel del Banco Europeo de Inversiones entra en juego para catalizar financiación hacia este sector. Pero hay mucho más por hacer, la presidenta de la entidad, Nadia Calviño, ha pedido al Consejo de Administración del BEI una revisión de los criterios que el banco utiliza para conceder préstamos, de tal manera que pueda abarcar una mayor definición de qué iniciativas vinculadas a la seguridad y defensa puede financiar.
En un escrito al Consejo de Administración del BEI, que se reunirá el próximo marzo, la española ha pedido "un nuevo ajuste de los criterios de elegibilidad del Grupo para que las actividades excluidas estén definidas con mayor precisión y tengan un alcance lo más limitado posible para poder cumplir con las nuevas prioridades políticas de la UE, salvaguardando al mismo tiempo las operaciones y la posición financiera del Grupo BEI".
En su carta de esta semana, la presidenta de la Comisión Europea planteaba su intención de movilizar 800.000 millones de euros en financiación para el sector de seguridad. Y una de las fórmulas que se utilizará para tal fin es la financiación del Banco Europeo de Inversiones. Sin embargo, su mandato tiene una limitación evidente, y es que solo puede invertir en proyectos con fines duales, es decir, que a la par sean fines civiles y militares. Por ejemplo, podría financiar la construcción de una infraestructura, pero no de armas.
"Tenemos la intención de proponer una revisión de nuestro marco operacional y la sustitución de la Iniciativa Estratégica Europea de Seguridad ad hoc por un por un objetivo transversal de política pública destinado a contribuir a la paz y la seguridad en Europa, con una ambiciosa dotación financiera y de capital que se determinará anualmente dentro del plan operativo del Grupo", prosigue Calviño en su escrito para conseguir el visto bueno de los Estados miembro que componen el Consejo de Administración de la entidad.
La entidad duplicó, en 2024, la cuantía que destina a proyectos de seguridad y defensa, hasta los 1.000 millones de euros, y pretende hacer lo mismo durante el presente ejercicio. Para cumplir con tal cometido, la entidad ha realizado un análisis para identificar huecos en la cadena de valor de las contrataciones del sector de defensa de tal manera que sea posible identificar nuevos proyectos susceptibles de ser financiados, ha indicado la española en un discurso en Luxemburgo.
"También tenemos la intención de integrar el actual programa de 8.000 millones de euros en un nuevo marco de política pública transversal y permanente", ha indicado la presidenta del BEI en un evento de la entidad. Es así como Calviño coge el mandato de la UE para darle a la entidad un giro para ampliar el foco de las inversiones que puede ejecutar y financiar nuevas iniciativas en seguridad y defensa.