
La consolidación (o no) del trabajo ha abierto diversos debates y frentes entre los empresarios y empleados. Es indudable que trabajar desde cualquier parte aporta a los trabajadores un plus en flexibilidad y conciliación que, al asistir a una oficina, no se tiene. A parte de los beneficios que el teletrabajo aporta a los empleados, el 47% de ellos también destacan que el hecho de no desplazarse a una oficina de manera presencial les permite ahorrar más de 100 euros al mes (gastos derivados del transporte, ya sea público o privado, comidas en la empresa...). Así confirma el estudio Teletrabajo 2025, ¿en qué momento nos encontramos? elaborado por Robert Walters.
Desarrollar las funciones de un puesto de trabajo desde casa era algo impensable en España, no solo hace 15 años cuando apenas el 2% de los ocupados podía hacerlo, sino que incluso justo antes de 2020, apenas el 3,5% de los españoles trabajaban desde sus hogares.
Con la llegada de la pandemia, el impulso del sector tecnológico y la lucha por el talento, muchas compañías apostaron por introducir el trabajo híbrido e incluso el trabajo en remoto, pero, ¿Cuál es la situación actual con el teletrabajo?
Para empezar a analizarlo, Guillermo Julio Sáez, responsable de Talento, Compensación y Estudios de Mercado de Robert Walters, destaca que el teletrabajo debe ser abordado desde múltiples prismas por el impacto socioeconómico que tiene en otros ámbitos como la vivienda, movilidad geográfica, polarización laboral, distorsiones de mercados retributivos, transferencia de conocimientos o el compromiso de los trabajadores hacia sus empresas. Así, es fundamental que las empresas comprendan los beneficios que el teletrabajo reportará en sus empleados y que les hará incrementar la productividad y fidelidad con la empresa.
Aún así, las políticas de flexibilidad en las empresas tienen a los empleados divididos, ya que el teletrabajo no se presenta como una prioridad para casi la mitad de los encuestados (48%), que reconocen que preferirían contar con una mayor flexibilidad horaria antes que percibir más días de teletrabajo.
A pesar de ello, el 79% de los trabajadores reconocen que cambiarían de empleo si su empresa elimina el teletrabajo o las políticas de flexibilidad. Y es que, el 47% de ellos valoran que el hecho de trabajar desde casa les ayuda a ahorrar mensualmente más de 100 euros (un 17% ahorran más de 200), por lo que una de las preferencias para mantener el teletrabajo es que también les permite mejorar su economía personal. Por otro lado, el 70% de los empleados encuestados no aceptarían renunciar a sus días de teletrabajo por otros cambios o mejoras que impulsara la empresa en materia de flexibilidad.
Aún así, las reticencias de los empresarios a adoptar el teletrabajo en sus negocios viene dado por una serie de problemas a los que se han enfrentado cuando han adoptado esta política de empleo.
Entre estos problemas se encuentran que el 26% ha visto disminuir la calidad del trabajo, al 32% se le hace más complicado fidelizar a los empleados y esto les dificulta la retención de talento, el 42% ve más complicado evaluar el desempeño de los trabajadores, por lo que no pueden evaluar su productividad, el 52% detecta como un problema el distanciamiento entre los propios empleados y los empleados y directivos y, como el problema principal se posicionan los problemas de comunicación, evaluado como el principal problema para el 72% de los encuestados.
Estas dificultades se relacionan en cierta manera con la percepción de los empleados. Y es que, el 46% de los trabajadores que gozan del teletrabajo, creen que esta política de empleo ha afectado de manera negativa a su visibilidad interna y al crecimiento dentro de la empresa.
Por este motivo, es fundamental que las empresas potencien las relaciones de calidad entre compañeros, la agilidad para resolver problemas, una mejor relación con los superiores, una mejor transferencia de conocimientos y entendimiento del negocio y proporcionar una mayor visibilidad con los superiores. Todo ello, para mejorar el teletrabajo y que se valore como un aspecto que beneficia y es fundamental en la empresa.
En caso de que las empresas se planteen adoptar un sistema híbrido, trabajo presencial y online, es fundamental tener en cuenta que la fórmula preferida es la que combina 2 días de teletrabajo y 3 de asistencia en la oficina. A través de este sistema se siguen potenciando las relaciones personales entre los trabajadores y los altos mandos de la empresa, así como una comunicación más fluida y una mayor flexibilidad que permite a los empleados compatibilizar tareas del hogar y de conciliación con el trabajo.
Con todo, el teletrabajo es una herramienta que ayuda a las empresas a atraer y fidelizar talento por las facilidades que ofrece. Sin embargo, es una herramienta que tan solo se encuentra al alcance de 1 de cada 10 trabajadores en España, con especial ímpetu en los empleos de alta cualificación, concentrado en entornos urbanos y empleos de alta productividad y elevadas remuneraciones.
El INE ya alertó que a pesar de que el teletrabajo aumentó un 0,7% en 2024 con respecto al año anterior, España queda aún relegada a las tasas con las que cuentan países vecinos europeos.