El Índice de Precios de Consumo (IPC) elevó una décima su tasa interanual hasta el 3%, su valor más alto desde el pasado junio por el encarecimiento de la electricidad, frente al descenso de precios que experimentó hace un año. La inflación subyacente sigue moderándose y se situó en el segundo mes del año en el 2,1% tres décimas menos que en enero que suponen su nivel más bajo desde diciembre de 2021.
Los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) son provisionales; habrá que esperar al 14 de marzo para conocer los definitivos. Con el avance del IPC interanual en el segundo mes del año, la inflación encadena cinco meses consecutivos de ascensos.
El alza de los precios de la luz coinciden con la vuelta del IVA de la electricidad al 21% desde el 1 de enero. Los carburantes y lubricantes para vehículos personas fueron a la contra e influyeron a la baja en la inflación de febrero, al encarecerse menos que en febrero de 2024.
En su valoración de los datos, el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha subrayado que el repunte de la inflación en febrero se explica por el aumento de la electricidad, "frente a la bajada de los carburantes, en línea con la moderación de los precios del petróleo".
En cuanto a la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), la cartera que dirige el ministro Carlos Cuerpo ha señalado que ya se sitúa "en el entorno del objetivo" del Banco Central Europeo (BCE). Este índice presenta una tendencia a la baja desde junio de 2024, cuando estaba en el 3%, a excepción de los leves incrementos de los meses de octubre y diciembre.
En términos mensuales, el IPC se incrementó un 0,4%, dos décimas más de lo que lo hizo en el arranque del año. En este caso, también se suman cinco meses consecutivos de ascensos intermensuales.
En cuanto a los datos armonizados -los que utiliza Bruselas para la comparación entre países- la tasa de variación anual del IPCA se mantuvo estable en febrero, en el 2,9%.