
La comunidad gallega registró un total de 47 procedimientos concursales en enero de 2025, un 42% más que los 28 en el mismo mes del año anterior, según datos avanzados por Informa D&B. Del total, 41 fueron concursos, cifra que refleja un alza del 46%, más que el 22% de la media estatal.
Otro dato facilitado por el documento revela que, además, hubo seis planes de reestructuración en la región este mes, uno más que en 2023, pero no se producen procedimientos especiales para microempresas. La media estatal crece un 139% para los procedimientos especiales y un 7% en el caso de los planes de reestructuración.
Por provincias, A Coruña suma con 12 concursos y 92 disoluciones; Lugo, 10 y 27; Ourense, 6 y 23; así como Pontevedra, 13 y 105 en cada caso. Los planes de reestructuración se reparten entre A Coruña (5) y Pontevedra (1).
Mientras, las disoluciones fueron 247 en la comunidad gallega en el primer mes, en este caso supone un descenso del 14% interanual. Por sectores, el del comercio se sitúa a la cabeza con 15, y suma dos planes de reestructuración. El de la construcción y actividades inmobiliarias es el que más disoluciones sufrió este mes con 54 hasta el momento.
El concurso de acreedores es un procedimiento judicial con el que una empresa recurre ante una situación límite porque ya no puede hacer frente a sus deudas. El objetivo es gestionar y administrar el patrimonio de la firma quebrada para que el mayor número posible de acreedores puedan cobrar el dinero que les deben.
Balance 2024
Situación en la que ninguna empresa quiere mirarse, pero que afectó en el 2024 a un 20 % más de firmas en España, según los datos de procesos concursales publicados en el Boletín Oficial del Estado (BOE). El mes de diciembre destacó por ser malo, con una subida del 37 % de las sociedades que no pudieron hacer frente a sus deudas.
Por ámbitos, las tendencias del pasado año afectaron de modo similar con el sector comercio al frente. Con todo, la concursalidad registró mejorías en los subsectores de la industria extractiva, donde bajó un 33 %, así como en el de la metalurgia y la automoción, en los que hubo, respectivamente, un 21 y un 16 % menos de empresas que tuvieron que afrontar un concurso de acreedores.
También mostraron mayor fortaleza el sector de la alimentación, donde las firmas obligadas a judicializar sus deudas bajaron un 6,9 %, así como en el de la industria de electrónica y TIC, con una caída del 6,7 por ciento. En el sector Primario la concursalidad cayó un 1,2 %.
Por comunidades, Madrid y Cataluña coparon el 25% y el 22 % de los concursos de acreedores. Le siguió Valencia, con el 13 % y Andalucía con el 11 %. Ya de forma más moderada se sitúa el País Vasco (4,8 %) y Galicia, con el 4,6 %.