Bruselas
La cuarta jornada de Foro Económico Mundial arrancaba con la esperada intervención del presidente de Argentina, Javier Milei, en una intervención que no dejó indiferentes a los oyentes. El hilo de su discurso giró en torno a la crítica de la "agenda woke" a abrazar los vientos de cambio de las fuerzas de extrema derecha y a limitar el poder del Estado.
El líder argentino ha dado pasos atrás respecto a sus declaraciones de ayer en las que afirmaba que su país se saldría del acuerdo Mercosur si esa "condición extrema" era necesaria para un acuerdo comercial con Estados Unidos. "Hay formas de avanzar sin perder la alianza con Mercosur", ha indicado este jueves, tras ser preguntado sobre sus declaraciones previas, según recoge EFE.
Milei ha cargado contra la "agenda siniestra del wokismo, que tanto daño ha hecho a Occidente" y ha hablado de "vientos de cambio en Occidente" para referirse al auge de las fuerzas de ultraderecha, para que "la mayoría de países de Occidente abracen la idea de libertad".
"Si queremos una nueva época de oro, es necesaria la reducción drástica del tamaño del Estado" y los organismos supranacionales, ha indicado. Milei defendió "devolver al pagador de impuestos lo que es suyo" y "limitar las funciones del Estado" que deberían reducirse a la defensa "de la libertad y la propiedad".
En su discurso en la localidad suiza de Davos, el líder argentino ha apostado por "desmantelar el edificio ideológico del wokismo enfermizo", ha calificado de "virus mental" la ideología woke con la que vincula a la izquierda, y ha afirmado que es "un cáncer" y la "gran epidemia de nuestra época".
Milei ha considerado que el "wokismo" supone la "liberación mediante la intervención del Estado" y "representa un régimen de pensamiento único" en el que se habla de feminismo, de diversidad, de inclusión, de aborto de ideología de género. "Es el avance mediante la distorsión y la aprobación de las causas nobles", ha agregado.
En un paso más, ha indicado que el feminismo radical "busca poner a una parte de la población en contra de la otra" y ha afirmado que lo que persigue son "privilegios". A ello ha sumado que "el siniestro ecologismo radical abandera el cambio climático", ha hablado de la "agenda sanguinaria y asesina del aborto" o afirmado que la política LGTBI "intenta imponer que las mujeres sean hombres y los hombres mujeres si así se autoperciben".
El líder ultraconservador recordó su propia intervención del pasado año cuando le dijo "al mundo que se ha equivocado" que "Occidente se ha desviado". "Les dije que era el comienzo de una nueva Argentina", "que había estado infectado de socialismo demasiado tiempo", ha apuntado.
"El mundo ha abrazado a Argentina", ha continuado para referirse a unos mejores datos fiscales o a la mejora de los datos de la inflación. La suya, ha asegurado, es una "nueva forma de hacer política" que consiste en decirle la verdad a la gente a la cara y confiar en que la gente lo entenderá". Además, ha destacado sus afinidades con otros líderes ultraconservadores entre los que enumeró a "mi querido Elon Musk", la "feroz dama italiana" para referirse a Giogia Meloni o el propio líder estadounidense, Donald Trump.