
El PP introdujo en el Senado una serie de rebajas de impuestos en la reforma fiscal del Gobierno para reducir su impacto en los contribuyentes estimado en 8.500 millones. Entre ellas, excluir a los jóvenes del pago del IRPF al inicio de su carrera o permitir a la banca deducirse el impuestazo a cambio de dar créditos a tipo reducido para comprar vivienda. Una serie de medidas bien encaminadas que no saldrán adelante ante el voto en contra que recibirán por parte de PNV y Junts. Ambos partidos se agarran al acuerdo firmado con el Ejecutivo para rechazar unas rebajas de impuestos pese a que son iniciativas que concuerdan con su ideario económico. La reforma fiscal saldrá así adelante en toda su extensión, lo que supondrá un golpe para la actividad y las inversiones.