
El final de la prórroga de la rebaja del IVA a los alimentos sumaría cerca de 1.000 millones de euros a la recaudación de 2024, si finalmente el Ejecutivo decide poner fin a la medida de alivio frente al acoso de los precios sobre la cesta de la compra. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, volvió a insistir el pasado jueves en que Moncloa esperará hasta el último día -el 30 de junio- para comunicar si mantiene -o no- la medida fiscal que exime del pago del impuesto a la compra de pan, leche, huevo, quesos o fruta, y que reduce el tipo al 5% en el caso del aceite y la pasta.
Todo dependerá del desglose del dato del IPC del pasado mes, que se conocerá en las próximas dos semanas. No obstante, el avance -publicado hace unos días por el Instituto Nacional de Estadística (INE)- anticipa un nuevo repunte de la inflación al 3,6%, tres décimas más que en el mes anterior, lo que allana el camino a la extensión de la medida. Desde su entrada en vigor -en enero de 2023- la rebaja del IVA a la alimentación ha asestado un buen bocado a recaudación. El pasado año, la medida restó 1.703 millones a los ingresos, según el informe de recaudación publicado por la Agencia Tributaria. Solo entre los meses de julio y diciembre, Hacienda dejó de ingresar 1.077 millones de euros.
El repunte constante de la cesta de la compra ya provocó que los de Sánchez prorrogaran la medida durante la segunda mitad de 2023. Lo mismo podría ocurrir el próximo junio, tendiendo en cuenta que, según los últimos datos disponibles, los alimentos repuntaron un 4,7% interanual, cuatro décimas más que en marzo, por el empuje del encarecimiento de frutas, legumbres y hortalizas. "Tenemos que ir al detalle específico, dentro del desglose de los componentes del IPC, para saber qué es lo que está pasando con los alimentos en concreto y este detalle lo tendremos en unas semanas", dijo el titular de Economía, Carlos Cuerpo, la pasada semana. Los datos definitivos del IPC se conocerán a mediados del mes de junio y, según el ministro, lo que se observa por ahora es que los grandes determinantes respecto a la inflación general están más ligados a la energía y los carburantes, que a la evolución del precio de los alimentos.
El Ejecutivo cuenta con margen de maniobra para extender -una vez más- la rebaja del IVA de los alimentos. Moncloa prevé que la ratio de recursos no financieros de las Administraciones Públicas respecto al PIB se sitúe en el 42,6% del PIB en 2024 y en el 42,9% en 2025. Este ligero aumento se debe, por una parte, al aumento de la actividad económica; eso sí, la proyección de la recaudación anunciada incluye la retirar de forma progresiva las rebajas fiscales aplicadas para combatir el alza de la inflación por la guerra de Ucrania, incluida la destinada a amortiguar el encarecimiento de la cesta de la compra.
Por su parte, el Partido Popular mantiene su petición de ampliar la rebaja del IVA a carnes y pescado. "Estamos en el quinto país peor y frente a esto ha habido propuestas, como ustedes conocen. Ha habido la propuesta de la bajada del IVA de los alimentos, que además por dos veces ha tenido el apoyo de las principales fuerzas y sin embargo el Partido Socialista decide no utilizarlo", dijo el portavoz de Economía popular, Juan Bravo, el pasado jueves. Sin embargo, la propuesta agrandaría agujero en los ingresos, en un momento complejo para el equilibrio de las cuentas, teniendo en cuenta la reactivación de las reglas fiscales a partir del próximo 2025. Además, tanto el Ejecutivo comunitario, como otros organismo -como la AIReF- aconsejan dejar naufragar estas iniciativas para apuntalar los objetivos acordados con Bruselas, y procurar la senda fiscal marcada por el Gobierno.
Fin de las medidas energéticas
El fin de la rebaja del IVA a la alimentación no es la única medida que podría agotarse. El presidente, Pedro Sánchez, decretó -el pasado diciembre- una extensión del IVA de la electricidad al 10% durante 2024 sobre todos los componentes de la factura renunciando a 514 millones de euros en ingresos.
El resto de medidas relacionadas con la energía, han ido agotándose a lo largo de los últimos meses. La reducción del IVA del gas al 10%, concluyó el pasado marzo, y el Impuesto Especial de la Electricidad subió al 2,5% a finales de marzo y retomará el 3,8% cuando concluya el próximo mes de junio. En conjunto, restaron 728 millones.