
La comunidad autónoma de Castilla y León tiene un 22,4 por ciento de su población en riesgo de pobreza o exclusión social, más de cuatro puntos por debajo de la media que se sitúa en un 26,5 por ciento, frente al 26 por ciento de 2022.
En concreto y según los datos definitivos de la Encuesta de Condiciones de Vida correspondiente al año 2023 publicada este martes por el INE, la comunidad autónoma de Castilla y León se sitúa en la mitad de la tabla en la denominada tasa AROPE que encabezan Andalucía (37,5%), Canarias (33,8%) y Extremadura (32,8%), con Castilla y León en el décimo puesto.
Por su parte, País Vasco (15,5%) y Comunidad Foral de Navarra (17,2%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza o exclusión social más bajas. La tasa AROPE se construye con la unión de la población que se encuentra en riesgo de pobreza o con carencias materiales o con baja intensidad en el empleo, informa Ep.
Respecto a las tasas de riesgo de pobreza, Castilla y León alcanza un 18,2 por ciento, dos puntos menos que la media (20,2 por ciento) y cuatro décimas más que en 2022, porcentaje que también es superior a los anotados en 2021 (17,8 por ciento), 2020 (15,1 por ciento); 2019 (12,9 por ciento) o 2018 (16,1 por ciento).
Según esta encuesta, las tasas de riesgo de pobreza más elevadas se dieron en Andalucía (30,5 por ciento), Extremadura (27,6 por ciento) y Canarias (26,1 por ciento), mientras que País Vasco (10,2 por ciento), Comunidad de Madrid (12,9 por ciento) y Comunidad Foral de Navarra (13,8 por ciento) presentaron las tasas de riesgo de pobreza más bajas con Castilla y León en décimo lugar, de nuevo en mitad de la tabla.
Los ingresos medios anuales más elevados se dieron en País Vasco (18.119 euros por persona), Comunidad de Madrid (16.817) y Comunidad Foral de Navarra (16.599) y los más bajos se registraron en Región de Murcia (11.314 euros por persona), Extremadura (11.363) y Andalucía (11.719).
Castilla y León ha alcanzado en este caso los 14.124 euros por persona, ligeramente por encima de la media (14.082) y superior a del año anterior, cuando se situó en los 13.323 euros.
Por otro lado y según esta misma encuesta, un 9,6 por ciento de los castellanos y leoneses reconoce retrasos de pagos relacionados con la vivienda principal o en compras a plazos, por debajo de la media (13,6 por ciento), y un 7,7 por ciento asegura que tiene "mucha dificultad" para llegar a fin de mes, frente a una media del 9,3 por ciento.
Gastos imprevistos
Además, un 26,2 por ciento de los castellanos y leoneses afirma que no tiene capacidad para afrontar los gastos imprevistos, inferior a la media (37,1 por ciento), y un 28,6 por ciento no se puede permitir ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año, también por debajo de la media (33,1 por ciento).
En este caso, Andalucía (13,6 por ciento), Extremadura (11 por ciento) y Canarias (9,9 por ciento) fueron las comunidades autónomas con mayores porcentajes de personas que llegaban a fin de mes con "mucha dificultad" en 2023. Las que presentaron los menores porcentajes fueron La Rioja (4,8 por ciento), Illes Balears (5,2% por ciento) y Principado de Asturias (5,6 por ciento).
Por su parte, el 53,1 por ciento de la población de Canarias, el 46,5 por ciento de Andalucía y el 46,3 por ciento de la Región de Murcia no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos en 2023 con País Vasco (20,6 por ciento), la Comunidad Foral de Navarra (27 por ciento) La Rioja (27,4 por ciento) en el lado contrario.
Además, Andalucía (43,9 por ciento), Canarias (42,2 por ciento) y Región de Murcia (41,6 por ciento) presentaron los mayores porcentajes de personas que no podían permitirse ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año en 2023, mientras que los más bajos correspondieron a País Vasco (19,4 por ciento), Comunidad de Madrid (22,6 por ciento) y Comunidad Foral de Navarra (24,8 por ciento).
Y en el caso de hogares con retrasos en los pagos relacionados con la vivienda principal o en compras a plazos, Canarias (21,3 por ciento), Región de Murcia (16,6 por ciento) y Islas Baleares (15,8 por ciento) presentaron los porcentajes de población más altos. Por el contrario, Cantabria (7,2 por ciento) y Asturias (9 por ciento) registraron los más bajos.