Valladolid
El Consejo de Gobierno ha aprobado en su reunión de este jueves el límite de gasto no financiero para 2024 que sitúa ese techo en 12.993,64 millones de euros, un 4,2 por ciento más respecto al que se calculó para el año 2023.
Según ha precisado el portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, se trata de "la cantidad más alta" desde que el Ejecutivo autonómico calcula esta magnitud que sirve como referencia para la elaboración de los presupuestos generales de la Comunidad --Castilla y León mantiene prorragadas las cuentas de 2023--.
Una vez aprobado el techo de gasto no financiero la Junta de Castilla y León remitirá este mismo jueves el documento a las Cortes para su inminente tramitación parlamentaria.
La Junta de Castilla y León ha estimado que el PIB autonómico de 2024 será del 1,7 por ciento, frente al 2,3 por ciento del año 2023, mientras que la tasa de paro se quedará en el 9,2 por ciento, cuatro décimas menos que en el año precedente, datos que han sido avalados, además, por la AIREF.
A más largo plazo, Castilla y León estima crecimientos del PIB del 1,2 por ciento en 2025 y 1,1 por ciento en 2026, tasas que resultan en línea, aunque por debajo de lo previsto por la AIReF, del 1,4 por ciento y 1,5 por ciento, respectivamente.
Respecto al empleo, las estimaciones de Castilla y León suponen una evolución menos favorable que la estimada por la AIReF en 2023 y prácticamente en línea para el año 2024. Así, la Comunidad apunta a un crecimiento del empleo, en términos de personas ocupadas de la Encuesta de Población Activa (EPA) del 0,2 por ciento en 2023 y del 1,1 por ciento en 2024.
Las estimaciones de la AIReF relativas al empleo, en términos de personas ocupadas de la Contabilidad Regional (CRE), prevén crecimientos del 1,9 por ciento y 1,2 por ciento para 2023 y 2024, respectivamente. No obstante, hay que tener en cuenta que las estimaciones de Castilla y León no son estrictamente comparables con las de la AIReF, ya que proyectan el empleo en términos dela EPA mientras que la AIReF lo hace en términos de personas ocupadas.
No obstante, la AIReF se recalca que las previsiones macroeconómicas para las comunidades autónomas se realizan en un contexto de alta "incertidumbre", por las "crecientes" tensiones geopolíticas, la "persistencia" de la inflación y el "endurecimiento" de las condiciones de financiación. Todo esto "está impactando de manera desfavorable en las expectativas de crecimiento económico de la Unión Europea y de España para los próximos años".
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