
La consellera de Hacienda y portavoz del Gobierno valenciano, Ruth Merino, ha asegurado tras la reunión del Pleno del Consell que la Generalitat está trabajando para "tratar de flexibilizar el palo que le viene ahora mismo a muchas familias" en la factura del agua, al incluirse desde agosto el canon de saneamiento incluyendo los importes que se aplazaron durante algo más de un año.
Según Merino, la Conselleria de Medio Ambiente está trabajando "en como aliviar el pago de ese canon", que se cobra a los ciudadanos de toda la Comunidad Valenciana a través de las facturas del suministro de agua.
Como publicó elEconomista.es, el anterior Gobierno del Botànic de Ximo Puig anunció la suspensión del cobro del canon dentro de sus medidas contra la inflación hace más de un año. Sin embargo, lo que finalmente se aprobó fue un aplazamiento de ese canon, de forma que lo que no se abonó tiene que pagarse ahora desde agosto, cuando esa medida ha dejado de estar en vigor.
"Palo"
Merino llegó a calificar en su intervención la suspensión del canon de saneamiento como "el engaño" de Ximo Puig ya que en la práctica "lo que se hacía era prorrogar el palo". Sin embargo no desveló que alternativas se están planteando ni cuando podrán aplicarse, ya que el final del aplazamiento entró en vigor el pasado agosto.
Pese a que se comunicó como una suspensión del canon, las propias facturas emitidas ya citaban en su letra pequeña que se trataba de un aplazamiento del pago, de forma que los abonados de toda la Comunidad Valenciana además de volver a pagar esa carga que no abonaban en el último año tendrán que añadir la devolución de los importes que no se incluyeron esos meses.
De esa forma, la Generalitat Valenciana recuperará los cerca de 280 millones de euros que en su momento anunció que seguirían en los bolsillos de los ciudadanos para combatir la subida de precios.
Varios ayuntamientos, como el de Valencia, han iniciado campañas para informar de esa subida que muchos hogares desconocen que se producirá en su próximo recibo del agua.