
El nuevo Gobierno valenciano del popular Carlos Mazón que aún no ha cumplido dos meses en el poder se enfrenta a la elaboración de sus primeros presupuestos autonómicos con un apretado calendario para cumplir los plazos necesarios. Al hecho de contar con unos tiempos más limitados y la necesidad de pactar el reparto de los fondos con su socio, Vox, se suma los problemas que arrastra la Administración valenciana para implantar una nueva plataforma tecnológica de gestión económica y financiera.
Este sistema informático, bautizado como Nefis y cuyo desarrollo encargó el anterior Gobierno de coalición de izquierdas de Ximo Puig, ya debería haberse utilizado para elaborar los presupuestos de este ejercicio. Sin embargo, el contrato inicial ha tenido que ser modificado en dos ocasiones para incrementar su presupuesto y ampliar los plazos.
Según certifica una auditoría de la Sindicatura de Comptes, el proyecto "ha derivado en un aumento del coste previsto (más del 48% del importe inicial de la adjudicación) y de los plazos de ejecución (ha pasado de 36 a 60 meses)".
En concreto y como publicó elEconomista.es, el sistema se adjudicó a finales de 2019 por un total de 16,5 millones de euros con la intención de que los presupuestos del ejercicio 2022 ya se pudieran preparar con este nuevo programa. Sin embargo, la puesta a punto y desarrollo del sistema para el que en el contrato inicial establecía un plazo de 3 años no ha dejado de acumular retrasos. De hecho ya se ha revisado dos veces al alza. Por ahora su coste ya se ha incrementado hasta los 24,5 millones de euros.
Aunque la auditoría reconoce la complejidad del proceso y destaca que la creación de este sistema tecnológico es necesario para mejorar eficiencia y los controles económicos financieros, apunta que "sus objetivos han sido muy ambiciosos, acordes con las necesidades reales y urgentes de la Generalitat, pero poco realistas".
Además, considera que "la gobernanza a nivel estratégico y la gestión de riesgos" en este caso "han supuesto una debilidad muy significativa". La Sindicatura, que reclama desde hace años esta herramienta informática de gestión, insta a la Administración a utilizar el sistema Nefis para la elaboración de los presupuestos de 2024.
Así, en el documento se incluye que el puesto de jefe de proyecto para Nefis lleva vacante desde noviembre de 2022. Para la Sindicatura, es una "figura fundamental para la adecuada gestión del proyecto en su plano más operativo y muy necesaria a la hora de afrontar la última etapa del proyecto, la puesta en marcha del sistema" por lo que recomienda que se designe cuanto antes un responsable.
Riesgo de un "segundo fracaso"
"Las consecuencias negativas de un fracaso tardarían años en ser reconducidas, sin mencionar los daños reputacionales de un segundo fracaso en lo que va de siglo para renovar el sistema contable de la Generalitat", subraya la Sindicatura.
La auditoría siembra muchas dudas sobre la capacidad del nuevo sistema informático para ser utilizado de forma inmediata para la elaboración de los presupuestos de la Generalitat Valenciana de 2024. En sus conclusiones la Sindicatura asegura que "su implantación exitosa no está todavía garantizada", pero también considera que el objetivo de preparar con el nuevo sistema las cuentas de 2024 "es necesario e inaplazable".
El departamento de Hacienda al frente del que Mazón ha situado a Ruth Merino tiene ahora la patata caliente de decidir si opta por Nefis con los problemas técnicos que conlleva estrenar y poner a prueba la plataforma tecnológica en pleno cambio de altos cargos y directivos en toda la Administración autonómica. Una decisión que tiene que tomarse en breva, ya que la intención de Hacienda es que en los próximos días se apruebe la Orden que establece las normas para confeccionar las cuentas autonómicas, una norma que se suele publicar a finales de julio pero que este año ha estado condicionada por las elecciones y el cambio de Gobierno.