
La Comisión Europea ha dado su visto este lunes bueno al plan del Gobierno español para dotar de un paquete de ayudas de 450 millones de euros a las empresas del sector intensivo en el consumo de gas, como es el caso de la cerámica.
La autorización por parte de Bruselas viene al amparo del reconocimiento de que la medida ayudará a las empresas a paliar las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania y, en concreto, para mitigar los altos precios del gas natural a los que tienen que hacer frente estas compañías intensivas en el consumo de gas.
En este marco, tal dotación económica se concederá en forma de subvenciones directas y deberá desembolsarse antes del 31 de diciembre de este año.
El Ejecutivo comunitario ha zanjado que este régimen de ayudas es "necesario", "adecuado" y "proporcionado" en aras de paliar una grave perturbación en la economía de un Estado miembro. Por lo que Bruselas ha dado el visto bueno a este paquete de ayudas en línea con la normativa de ayudas de Estado de la UE.
La Comisión Europea ha considerado, en su evaluación, que el planteamiento español cumple con las condiciones del Marco Temporal de Crisis y Transición. De esta forma, la ayuda no superará el 50% de los costes elegibles en ayudas de 4 millones de euros, tampoco el 40% de los costes elegibles para las ayudas que alcancen los 25 millones.
Fue a finales del pasado año que el Gobierno de Pedro Sánchez anunció un paquete de ayudas dotado de 450 millones de euros para hacer frente al alza de costes de gas en la industria gasintensiva. Tal cuantía económica se dirigirá a las firmas de cerámica, papel, vidrio, hierro, acero, aluminio, fibras sintéticas y productos alimenticios o fibras artificiales y sintéticas.
Las subvenciones directas se distribuirán atendiendo a parámetros vinculados al consumo intensivo de gas, la evolución de precios o los beneficios de las actividades industriales. Con todo, la medida fue acogida con críticas por parte del sector cerámico, que considera que no cumbre las pérdidas que ha tenido que afrontar la industria.
Como parte de esta medida del Gobierno, se incluyen 500 millones en préstamos del ICO que, más tarde, las empresas tendrían que devolver.