
Mark Cuban lanzó recientemente su predicción personal acerca de la próxima implosión que sufrirá el mundo de las criptomonedas. "Creo que la próxima implosión es el descubrimiento y la eliminación del comercio de lavado en el mercado centralizado", aseguraba el inversor multimillonario al sitio web financiero TheStreet.
El comercio de lavado es una actividad en la que el comerciante compra y vende el mismo activo financiero en numerosas ocasiones, lo que muestra un volumen irreal y hace creer a otros participantes que la demanda es elevada. Esto puede provocar que inviertan dinero real por unas expectativas falsas y deformadas.
Una actividad fraudulenta
Como una demanda elevada suele conducir también a unos precios altos, quienes recurren a esta práctica pueden hacer que el precio suba de acuerdo con sus expectativas, para cobrar una suculenta cantidad y entonces abandonar, dejando a otros inversores con expectativas delante de un activo que caerá progresivamente en su valor.
Además, a pesar de que esta práctica lleva siendo ilegal en los mercados financieros estadounidenses tradicionales durante décadas, el espacio cripto brinda a nuevas oportunidades para llevarla a cabo con impunidad. "Poner una cantidad fija en el comercio de lavado cripto es mucho más complicado que en las finanzas tradicionales, pues los mercados varían enormemente y además estás descentralizados", explica el jefe de operaciones de la compañía de vigilancia de mercado Solidus Labs, Chen Arad.
El ejemplo paradigmático, Bitcoin, es una divisa que se intercambia en miles de plataformas, las cuales son centralizadas y descentralizadas, reguladas y desreguladas. Arad asegura que los criminales pueden jugar con estos intercambios y usar las posibilidades de las criptomonedas para manipular el mercado de forma sofisticada.
El uso de Bitcoin por los delincuentes
El último análisis de intercambios cripto en el mundo, llevado a cabo por Forbes, muestra que algo más del 50% de canjes declarados son falsos. Para su realización, la revista se sirvió de cuatro compañías de medios sobre criptodivisas: CoinGecko, Nomics, Messari y CoinMarketCap. También se fijó en gran cantidad de intercambios de este activo digital.
Volviendo a Cuban, el cual advirtió primero de que no posee detalles para apoyar su pronóstico, este señaló que presuntamente existen decenas de millones de dólares en canjes para fichas digitales que apenas tienen uso. Asegura que no es capaz de ver cómo se pueden convertir todos los activos de ese tipo en dinero de forma sencilla.
Y Arad le da la razón con respecto al problema del comercio de lavado: "Si no se impide esta práctica criminal, entonces las criptomonedas nunca alcanzarán su potencial de convertirse en servicios financieros accesibles y seguros".
Las dificultades de combatir esta práctica
Para poder identificar casos de comercio de lavado en el universo de los criptoactivos, Arad dice que se debe contar con expertos técnicos, financieros y en criptomonedas que usen tecnología especializada, y así encontrar la manipulación.
Pero el experto añade que no se debe olvidar que la industria lleva años luchando también contra este tipo de prácticas. "La mayoría de intercambios regulados poseen equipos de vigilancia para el cumplimiento que son más grandes que sus relativos en las finanzas tradicionales, y que están igualmente liderados por veteranos. Con respecto a los canjes que se sirven de vigilancia del mercado, la tasa de comercio de lavado implica solo una fracción de un porcentaje", comenta.
Entonces, Arad asevera que si un inversor minorista quiere protegerse de caer en la trampa de un comercio de lavado, lo que debe hacer es confiar solo en las plataformas de criptodivisas que estén reguladas, y que cuenten con tecnología de vigilancia de mercado capaz de detectar actividades de canje sospechosas.