
El mayor presupuesto de la historia de Castilla y León alcanzará los 13.809 millones (un 12,35% más respecto a 2021) y batirá récord de inversión, con 2.534 millones (un 55,4% más). Ocho de cada diez euros irán a políticas sociales mientras que la emisión de deuda se reducirá un 22,24%.
"Son los presupuestos que en estos momentos necesita Castilla y León" ha señalado el presidente de la Junta, en la presentación de las cuentas del próximo año que ha definido como "las más altas, las de mayor inversión y la de menos impuestos de la historia autonómica".
Mañueco ha presentado el proyecto de ley junto al vicepresidente, Juan García Gallardo, y el consejero de Econonomía, Carlos Fernández Carriedo, "con el que pretendemos enfocar el futuro ante momentos de complejidad y que están adaptados a la realidad", ha añadido.
El vicepresidente, Juan García-Gallardo, ha insistido en que "es el Presupuesto de la unidad, de un gobierno único", a la vez que ha anunciado una congelación del sueldo del equipo de Gobierno y de los altos cargos de las Cortes.
El 81 % del presupuesto estará orientado a gasto social, a lo que se une que los beneficios fiscales para las familias, la juventud y las empresas aumentan cerca de un 60% respecto a 2021 (último aprobado), que se traduce en un ahorro fiscal de 600,4 millones de euros.Asimismo, la Junta de Castilla y León impulsará políticas de apoyo y beneficios ficales para las familias que alcanzan los 2.450 millones de euros. En concreto, a través de programas de respaldo se destinarán 1.867 millones, a los que se sumarán beneficios fiscales que llegarán a 583 millones de euros. Supresión del tramo autonómico para las familias numerosas
El documento, que se remitirá mañana a las Cortes para su tramitación parlamentaria, recoge un menor crecimiento del PIB, concretamente el 1,6%, que ha sido avalado por la Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal).
Los beneficios fiscales -que suponen un aumento del 59,21 % respecto a 2021 y favorecerán a más de 478.000 contribuyentes de Castilla y León-, están dirigidos especialmente a apoyar a las familias, al acceso a la vivienda y al fomento al empleo. El importe medio del beneficio fiscal asciende a 1.254 euros.De los 13.809 millones de euros del proyecto presupuestario, 12.470 corresponden a gasto no financiero y 1.339 millones de euros a operaciones financieras.
En esta cuantía están incluidos los fondos de la PAC (924,4 millones de euros), los destinados a abonar los intereses de la deuda (1.469,3 millones) y los reservados para financiar a las instituciones de la Comunidad a través del Presupuesto de las Cortes (36,22 millones de euros).
Así, la cantidad que van a gestionar las consejerías en 2023 para ejecutar sus políticas asciende a 11.263 millones que es un 11,5 % superior a la del último presupuesto aprobado.
El análisis sobre el estado de gastos en el presupuesto elaborado para el ejercicio 2023 destaca por un incremento de las operaciones de capital del consolidado sector público que ascienden a 2.534 millones de euros, lo que supone aumentar un 55 % las políticas para generar empleo a través de las inversiones.
Más gastos corrientes
Por su parte, se incrementan los gastos corrientes en bienes y servicios, hasta alcanzar los 1.947 millones de euros, que suponen el 14,10 % de los gastos totales. Así, el 94,13 % corresponde a los gastos corrientes en bienes y servicios en las áreas sociales, concretamente 1.832 millones, que se destinarán a gastos como el mantenimiento de hospitales y centros de salud, centros educativos públicos y residencias de la tercera edad, entre otros. Otro de los grandes capitulos es el correspondientes a los gastos de personal, que crecen un 11,39% hasta los 3.312 millones.
Transformar la economía regional para crecer y crear empleo estable y de calidad es otro de los ejes en torno a los que giran las cuentas de la Junta de Castilla y León para el próximo ejercicio. En este sentido se destinan 2.534 millones en operaciones de capital del consolidado sector público, para modernizar y seguir mejorando la economía de la Comunidad.
Esta cifra supone que los gastos de capital aumentan un 55,39 % respecto a 2021, esto es, 903 millones más. Los mayores volúmenes de inversión se concentran en los sectores económicos, destacando las áreas de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural; Industria, Comercio y Empleo; y Medioambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio.
De igual modo se incrementan las inversiones reales un 50 %, alcanzando los 1.015 millones de euros, lo que supone 342 millones más que en 2021. De ellas, el 63,16 % se destina a los sectores económicos (642 millones) -lo que supone un aumento del 52,69 %- y el 36,84 % corresponde a las consejerías del área social, con un 48 % de incremento (374 millones).
Las transferencias de capital también experimentan un incremento, concretamente de un 35,27 %, hasta los 1.427 millones, destacando que el 92,18 % se destinarán a impulsar la economía de la Comunidad. Concretamente, 1.150 millones de euros.
Respecto a los gastos de la deuda pública, alcanzan los 1.469 millones de euros, lo que supone un 10,64 % de los gastos totales tas crecer un 3,23%. En este sentido, se reducirá un 24% la emisión de deuda pública "lo que nos coloca en el camino del superávit", ha señalado Juan García-Gallardo.
Para continuar impulsando la economía de Castilla y León y contribuir a la creación de empleo, la Administración autonómica destina el 74,56 % de las inversiones a los sectores económicos.
150 millones para el tejido empresarial
Esto se traduce en un presupuesto inversor y dinamizador de la economía de la Comunidad, destacando la red de ayudas y apoyo a empresas, pymes y autónomos que dispone de 150 millones de euros para propuestas empresariales generadoras de empleo. A ello se suman programas de ahorro, diversidad energética y energías renovables, para los que se destinan 51,5 millones. Estas acciones están mayoritariamente gestionadas por la Consejería de Economía y Hacienda, que dispondrá de un presupuesto de 542,5 millones de euros.
Para aumentar las oportunidades laborales con actuaciones de formación para el empleo, economía social y programas de mejora de empleabilidad se destinan 426 millones, con un crecimiento del 23,91 %, una cuantía que administrará la Consejería de Industria, Comercio y Empleo (que gestionará 445 millones del presupuesto).
El impulso económico está ligado al proceso de modernización y digitalización de Castilla y León. Así, las cuentas para 2023 reservan 292 millones para la Consejería de Movilidad y Transformación Digital.
El proyecto de presupuestos de la Comunidad para el año 2023 contempla 11,3 millones de euros para la lucha contra la violencia de género que crecerá "de manera importante" en un 10 por ciento. Además se habilitará una partida de 500.000 euros para atajar la violencia intrafamiliar, una de las demandas de Vox.