A medio mes de que se prorrogue tres meses más el plan de choque contra la crisis generada por la guerra en Ucrania, el Gobierno aún no tiene cerrado si la bonificación a los combustibles seguirá beneficiando a toda la población. El Gobierno no da con la tecla para introducir un sesgo por renta para limitar el acceso al descuento de 20 céntimos por litro repostado.
La vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha reconocido este miércoles que todavía no han dado con una fórmula ágil para acotar su aplicación a ciertos colectivos, por lo que seguramente prolongará la ayuda para toda la ciudadanía. "Todo parece, por ahora, que lo recomendable es seguir manteniendo ese descuento generalizado", ha apuntado en declaraciones a Telecinco.
Los equipos técnicos del Gobierno llevan tiempo trabajando para tratar de encontrar una fórmula que permita "focalizar más el esfuerzo en los colectivos profesionales, en los grupos más vulnerables o en las clases medias, siempre sabiendo que lo más importante es que la medida sea eficaz".
Si no consiguen encontrar el modo de "dirigir de manera clara esta medida, seguiremos manteniendo el respaldo, el refuerzo, el acompañamiento al conjunto de la sociedad española en los mismos términos en los que lo hemos hecho en estos tres últimos meses", ha señalado.
Fue el ministro de Consumo, Alberto Garzón, el primero en deslizar que existía un debate sobre este posibilidad, aunque la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, declaraba poco después que la prórroga no cambiaría los términos del descuento.
Sin embargo, el debate cogió fuerza tras las declaraciones de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Diaz, que confirmó que estaban en conversaciones con el PSOE para sesgar el descuento a las gasolinas.
Calviño no descarta que pueda aumentarse el descuento
En pleno debate, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, no descartó el lunes que el Gobierno se esté planteando aumentar la actual bonificación por litro de los carburantes: "Lo que vamos a hacer es analizar si hay que hacer modificaciones o cambios para garantizar que esas medidas sean lo más eficaces posibles" para ayudar al consumidor.
La bonificación entró en vigor el 1 de abril para contener el efecto en los bolsillos de la escalada que sufre el petróleo tras la invasión rusa, y, aunque no ha podido evitar que el precio de la gasolina haya alcanzado máximos históricos, sí ha frenado una escalada aún mayor,
Según los últimos datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 31 de mayo y el 6 de junio, la gasolina se vende en España -una vez aplicado el descuento- a una media de 1,848 euros el litro, mientras que el gasóleo lo hace a 1,716 euros. Sin la bonificación, superaría por primera vez en la historia los 2 euros por litro, situándose en 2,048 euros.