Ni siquiera la crisis del coronavirus logró estrechar el déficit de la balanza comercial que tiene la Unión Europea con respecto a China. La diferencia entre lo que exporta el bloque comunitario al gigante asiático y lo que le compra se ha más que duplicado entre 2014 y 2021, alcanzando el pasado año un déficit comercial de 248.900 millones de euros cuando en 2014 se ubicaba en 111.400 millones.
Según datos de Eurostat, en 2021 China fue el primer país de la Unión Europea a nivel de importaciones de bienes, con un 22,4% del total, pero solo el tercer socio a nivel de exportaciones, con el 10,2% de sus ventas al exterior.
En las cifras del organismo estadístico europeo se plasma que el déficit comercial no ha dejado de crecer desde el año 2017, a pesar de que las exportaciones a China han ido aumentando progresivamente. Sin embargo, la aceleración de las importaciones ha evolucionado a mayor ritmo. De esta forma, en la década que va de 2011 a 2021 las importaciones del país asiático se han incrementado un 84%, mientras que las exportaciones a dicho país desde el bloque europeo han subido un 77%.
De hecho, ni siquiera la disminución del comercio mundial por la pandemia se muestra en los datos, ya que las cifras también aumentaron. La única excepción que muestran las gráficas se produjo en el mes de marzo de 2020, cuando la mayoría de los países europeos entraron en un confinamiento estricto, marcando un mínimo mensual de importaciones en el año que se situó en los 24.700 millones de euros.
Por tipos de bienes, lo que más compra la Unión Europea al gigante asiático es maquinaria y vehículos (56%), seguido de bienes manufacturados (35%) y productos químicos (7%). El orden de las exportaciones de la UE es el mismo pero los porcentajes difieren sustancialmente: maquinaria y vehículos (52%), bienes manufacturados (20%) y químicos (15%). La UE solo logra un balance comercial positivo en productos alimentarios y materias primas, pero su cuantía es escasa comparativamente hablando con las otras categorías.
En cuanto a los países, los mayores importadores dentro de la UE son Holanda, Alemania y Francia, con España en sexto lugar al adquirir bienes por valor de 30.500 millones de euros. En el lado de las ventas, Alemania, Francia y Holanda son los que más exportan a China, con España en sexto lugar con 8.600 millones. De los grandes países del bloque, Alemania es el único que tiene su balanza comercial con China en positivo (también lo hacen Irlanda y Finlandia), mientras que en el lado negativo destaca Holanda con un déficit de casi 95.000 millones de euros. España se sitúa como el cuarto país de la UE con peor balanza comercial, con 21.862 millones de euros de diferencia entre importaciones y exportaciones.