La respuesta de Occidente frente a las medidas rusas en la crisis de Ucrania ya son una realidad: una batería de sanciones coordinadas entre la Unión Europea, Reino Unido y Estados Unidos para golpear a Putin. A lo largo del día, estas tres partes han hecho públicas cuáles serán las acciones concretas que cada país pondrá en práctica para hacer el mayor daño posible al Kremlin.
Estados Unidos ya ha afirmado que impondrá sanciones a la deuda soberana del país y a la que tienen las 'élites' de la nación y sus familias. Estas sanciones, que serán más duras que las planteadas hasta el momento, implican que ya no podrán negociar su deuda con en los mercados estadounidenses. Reino Unido y Europa también se han sumado a esta medida cerrando las puertas al mercado del Viejo Continente.
"Eso significa que hemos cortado al gobierno de Rusia de la financiación occidental", dijo Biden en declaraciones en la Casa Blanca. "Ya no puede recaudar dinero de Occidente y no puede negociar su nueva deuda en nuestros mercados. o los mercados europeos tampoco".
Desde Reino Unido, han congelado los activos de los principales bancos rusos con efecto inmediato. En especial, las sanciones se centrarán en tres bancos, VEB.RF, Bank Rossiya y Promsvyazbank. por financiar operaciones militares en operaciones separatistas al este de Ucrania. Al mismo tiempo, las tres partes restringirán al Gobierno ruso el acceso a los mercados financieros.
Respecto a la VEB, Estados Unidos ha hablado abiertamente de "sanciones de bloqueo total", aunque no se conoce exactamente en qué se traducirá esta medida. En principio, no se sabrá exactamente como se ejecutará esta medida hasta que las sanciones sean publicadas por el Departamento del Tesoro.
Biden, por su parte, firmó el pasado domingo un bloqueo total a todas las inversiones en territorios separatistas y afirmó en el discurso de hoy que estas medidas "seguirán aumentando a medida que la crisis siga escalando''. El presidente de los Estados Unidos, defiende que es necesario endurecer aún más estas medidas y califica lo ocurrido recientemente como "el inicio de la invasión del país".
Tras sus palabras, el precio del petróleo ha bajado, los expertos de este modo creen que este no será más que un primer paso en una espiral de nuevas sanciones, que afectarán de forma determinante al precio del oro negro y que, en principio, golpearán con fuerza a la economía rusa, en especial a sus exportaciones y a las entidades financieras del país. Incluso está abierta la puerta a excluir a sus bancos del sistema financiero global de datos.
Al margen del apartado económico, Biden responde a esta "invasión" con movimiento en los países bálticos, "fortalecer su posición". A pesar de ello, explicita que no enviará por el momento nuevos efectivos, sino que serán los ya ubicados en Europa. El presidente añade que "Tenemos nuestro próximo movimiento preparado".
Putin reconoció la independencia de las repúblicas de este de Ucrania, Lugansk y Donetsk, las dos regiones separatistas en la frontera con Rusia. Inmediatamente, asumió la soberanía de las dos naciones enviando tropas a las mismas, incluyendo así la región del Donbás a su área de influencia.