Nueva York
Con la pandemia todavía en pleno apogeo, con más de 52,3 millones de casos registrados en todo el mundo, buena parte de ellos concentrados en Estados Unidos, India, Brasil, Francia, Rusia y España, los viajes internacionales siguen estando restringidos y dependen de las pruebas negativas por Covid-19 de los pasajeros.
Una condición que no ha tardado en generar la aparición de un mercado negro para acceder a resultados negativos manipulados o falsificación de documentos en países como Francia, Brasil y Reino Unido. Según informa la agencia Associated Press, el pasado viernes siete individuos con edades comprendidas entre 29 y 52 años fueron detenidos en el aeropuerto Charles de Gaulle por vender certificaciones de pruebas negativas falsas.
La fiscalía de Bobigny indicó que estos se vendían a los viajeros por entre 150 y 300 euros. Los arrestos se produjeron como parte de una investigación que comenzó con el descubrimiento de un pasajero que se registró para un vuelo de septiembre a Addis Abeba con un documento falso que certificaba haber recibido resultados negativos en las pruebas. Los sospechosos enfrentan ahora hasta cinco años de prisión y una multa máxima de 375.000 euros si son condenados.
A finales de octubre cuatro turistas fueron arrestados en Brasil por supuestamente falsificar pruebas de Covid-19. La detención de dos hombres y dos mujeres, todos ellos de nacionalidad brasileña, se produjo después de aterrizar en Fernando de Noronha, al norte del país, acusados de falsificación de documentos, uso de documentos falsificados y asociación delictiva.
En Reino Unido, un hombre de nacionalidad británica confesó al The Lancashire Telegraph que cambió su propio nombre y fecha de nacimiento en el resultado de la prueba electrónica de un amigo y lo imprimió cuando necesitaba resultados negativos para viajar a Pakistán.
A día de hoy, en Estados Unidos, un mayor acceso a pruebas hace pensar que este tipo de prácticas no parece estar extendida. Sin embargo, desde el comienzo de la pandemia, tanto el FBI como la Comisión Federal de Comercio han alertado sobre la aparición de centros no autorizados para realizar pruebas cuyo objetivo es robar a los individuos números de seguridad social e información de sus tarjetas de crédito.
Dicho esto, este tipo estafas suelen tener menos posibilidades de éxito en destinos que requieren que todos los resultados de las pruebas se entreguen electrónicamente en lugar de aceptar formularios impresos.
Hawái, por ejemplo, implementa desde el pasado 15 de octubre un programa de pruebas que requiere que los visitantes se registren previamente online y presenten resultados negativos de las pruebas de un laboratorio pre-aprobado por las autoridades 72 horas antes del viaje. Este estado solo acepta un tipo de prueba específica, la amplificación de ácido nucleico, y arresta e impone multas a aquellos que comentan algún tipo de infracción.