La confianza de los inversores en Alemania sorprende al alza en septiembre y se sitúa en máximos de mayo del año 2000. El índice ZEW sube 5,9 puntos hasta los 77,4 puntos. Los profesionales mejoran su percepción sobre la economía a la vez que lo hacen sus perspectivas. Pese a ello, sigue habiendo una gran brecha entre los dos indicadores. La percepción económica continúa en la profundidad del territorio negativo en -66,2 puntos.
El índice ZEW de confianza entre los inversores se ha convertido en el mejor indicador de la distancia que existe entre en la economía real y las expectativas de las bolsas. Mientras el índice se sitúa en máximos históricos, la valoración de la situación económica en Alemania se sitúa en -66,2 puntos, pese a la mejora de 15,1 puntos respecto a agosto. Niveles comprables a los alcanzados en la pasada crisis financiera.
"El sentimiento económico ha aumentado de nuevo, lo que indica que los expertos continúan esperando una recuperación notable de la economía alemana", comenta Achim Wambach, presidente del prestigioso instituto ZEW.
Sin embargo, reconoce que hay factores que parece que están pasando por encima los inversores. "El estancamiento de las conversaciones sobre el Brexit y el aumento de los casos de COVID-19 no pudieron frenar el ánimo positivo", comenta. Y añade que hay perspectivas aún negativas para el sector bancario con "temores de un número creciente de incumplimientos de préstamos en los próximos seis meses", indica Wambach, sobre el complicado contexto económico que tiene que atravesar la economía alemana.
El sentimiento de los expertos de los inversores sobre el desarrollo económico de la eurozona aumenta en 9,9 puntos, lo que llevó el indicador a un nivel actual de 73,9 puntos para septiembre. El indicador de la situación económica actual en la eurozona subió 8,9 puntos hasta un nivel de -80,9 puntos. Por tanto, las perspectivas para la eurozona también han mejorado notablemente, aunque en menor medida que las de Alemania.
