La vicepresidenta Económica de España, Nadia Calviño, vuelve a sonar en las quinielas para la presidencia del Eurogrupo. El actual líder, el portugués Mário Centeno, ha dejará de ser ministro de Finanzas de su país el próximo día 15 y cesa como presidente de la institución. Su mandato, en cualquier caso, finalizaba dentro de un mes.
Calviño es una candidata fuerte para el puesto porque conoce muy bien las instituciones europeas al haber sido ha sido alta funcionaria de la UE: durante 12 años estuvo en la Comisión Europea, uno de los motivos por los que Sánchez la invitó a formar parte del Ejecutivo. Está muy bien valorada en Bruselas, es respaldada por su compañero en la familia socialista, el ministro alemán Olaf Scholz, y mantiene una estrecha relación de trabajo con otros como el francés Bruno Le Maire.
Además, la elección de un candidato del Norte, el finlandés Tuomas Saarenheimo, para dirigir las reuniones de los números dos del Eurogrupo, facilita que el cargo vaya para un país del Sur. También es previsible que el puesto se mantenga en manos socialistas, para respetar el delicado equilibrio entre familias dentro del entramado comunitario.
Otros perfiles similares, como el del ministro de Finanzas italiano, el también socialista Roberto Gualtieri, están casi descartados por ya ocupar Italia la cartera de Economía en la Comisión Europea y la presidencia de este comité en el Parlamento Europeo.Otro de los nombres que suena es el del ministro de Finanzas luxemburgués, el liberal Pierre Gramegna.
Además, sería el tercer miembro del Ejecutivo que suena para un puesto en las altas instancias internacionales en las últimas fechas, junto con Arancha González Laya para la Organización Mundial de Comercio (OMC) y Pedro Duque para la Agencia Espacial Europea (ESA). Se sumaría a la llegada de Josep Borrell hace unos meses como jefe de la diplomacia de la UE.
Adiós de Centeno
El presidente de la República Portuguesa, Marcelo Rabelo de Sousa, ha aceptado la propuesta del primer ministro, Antonio Costa, para sustituir a Centeno por João Leão, hasta ahora secretario de Estado de Presupuestos. El traspaso de poderes tendrá lugar en una ceremonia el próximo lunes, ha informado la Presidencia en un comunicado.
El mandato de Centeno al frente del Eurogrupo finaliza el 13 de julio y él mismo ha confirmado que seguirá en el puesto hasta entonces, mientras sus compañeros avanzan en el proceso de nombrar a su sucesor o sucesora. Según la prensa portuguesa, ahora asumirá el puesto de gobernador del Banco de Portugal.
"Mi mandato como presidente del Eurogrupo finalizará el 13 de julio de 2020. El jueves informaré a mis colegas del Eurogrupo sobre mi decisión de no buscar un segundo mandato", ha explicado en un mensaje compartido en la red social Twitter.
Por lo tanto, Centeno seguirá presidiendo las reuniones de este organismo durante un mes a pesar de que desde el próximo lunes ya no será ministro en su país. No será la primera vez que esto suceda, sin embargo, puesto que su predecesor, Jeroen Dijsselbloem, continuó dirigiendo las reuniones de este organismo durante unos meses después de haber abandonado la cartera económica del Gobierno holandés.
La idea es que los ministros de Finanzas de la Eurozona lanzarán ya este jueves el procedimiento en la reunión por videoconferencia que tendrá lugar, según han confirmado fuentes comunitarias.
Esta carrera empezará con un plazo para presentar candidaturas, aunque en la que incluso se podrían conocer las primeras candidaturas al cargo. Después, en un encuentro posterior, los ministros elegirán a su nuevo presidente en un voto pro mayoría simple.
Dos años y medio al frente del Eurogrupo
Centeno, perteneciente a un Gobierno socialdemócrata aunque sin carnet de partido, fue elegido presidente del Eurogrupo en diciembre de 2017 y se convirtió así en la tercera persona en ocupar la presidencia de este organismo desde su puesta en marcha de 1998, tras el luxemburgués Jean-Claude Juncker y el holandés Jeroen Dijsselbloem.
En ese momento, el hecho de pertenecer a un país del sur del bloque y el juego de equilibrios políticos (en ese momento los populares europeos ostentaban las tres presidencias de la UE) facilitaron su elección y se impuso al luxemburgués Pierre Gramegna, el eslovaco Robert Fico y la letona Dana Reizniece-Ozola.
Durante estos dos últimos años y medio, Centeno ha presidido las reuniones de un Eurogrupo que ha ido perdiendo interés mediático tras la crisis financiera. Hasta el brote de COVID-19 que ha monopolizado los debates entre los ministros económicos, el Eurogrupo se encargó de profundizar en la arquitectura de la Unión Económica y Monetaria (UEM).
En esta línea, los ministros avanzaron en el apuntalamiento de la Unión Bancaria con la creación de una nueva de seguridad en casos de quiebras bancarias, aunque todavía permanecen congeladas las negociaciones para crear un fondo europeo de garantía de depósitos bancarios (EDIS, por sus siglas en inglés).
El mayor logro durante el mandato de Centeno fue el acuerdo del Eurogrupo para crear un presupuesto de la eurozona, que fue bautizado como Instrumento Presupuestario para la Convergencia y la Competitividad (BICC) y cuyo diseño sólo preveía un 20% de sus fondos para ayudar a países en dificultades.
Sin embargo, la pandemia de coronavirus ha provocado que este instrumento presupuestario quede sepultado por el fondo de reconstrucción planteado por la Comisión Europea para relanzar la economía.
La salida de Centeno del Gobierno se produce también tras varios choques con el primer ministro portugués. El último, el pasado mes de mayo, a causa la polémica desatada por el préstamo de 850 millones de euros que el ministro anunció para Novo Banco a pesar de que Costa había garantizado una auditoría antes de conceder los fondos.
Sánchez y Duque suenan para la OMC y la Agencia Espacial Europea
El anuncio de la salida de Centeno coincidió con la videoconferencia de los ministros al cargo de Comercio, en la que se discutió la posibilidad de presentar una candidatura única europea para la dirección de la OMC que ha dejado libre el brasileño Roberto Acevedo. La ministra de Exteriores, Arancha González, parte en buena posición, por haber sido la mano derecha del ex responsable del organismo, Pascal Lamy. Pero contará con dura competencia. Dentro de Europa, el comisario de Comercio, el irlandés Phil Hogan, confirmó ayer que está considerando presentarse.
Pero además otras regiones consideran que les ha llegado el turno de presidir la OMC. Tres de sus seis dirigentes han sido europeos, y ninguno ha procedido de África, desde donde ya suenan varios nombres, como el ex-ministro de Finanzas de Nigeria, Ngozi Okonjo-Iweala.
El proceso de candidaturas se cerrará el 8 de julio, y se espera elegir un candidato por consenso entre los 160 miembros de la institución para septiembre.
Por último, el Gobierno también está considerando proponer al astronauta y ministro de Ciencia, Pedro Duque, para liderar la Agencia Espacial Europea. En este caso, la silla no se quedará libre hasta junio del año que viene, cuando está previsto que abandone el cargo el alemán Johann-Dietrich W?rner. Tras su paso por el Gobierno, Duque ha completado su perfil para dirigir la agencia europea, en la que ya ha ocupado tareas directivas, y tras pasar también por el sector privado