Economía

Japón vive su peor contracción desde 1974 por el hundimiento de las exportaciones

El economía japonesa sufrió el cuarto trimestre de 2008 una contracción del 12,7% a ritmo anual (-3,3% respecto al tercer trimestre) debido al desplome de exportaciones e inversiones. Este retroceso del producto interior bruto (PIB) de la segunda economía mundial es el más fuerte desde la caída de un 13,1% a ritmo anual registrada el primer trimestre de 1974, en pleno choque petrolero.

Los economistas se esperaban por término medio una contracción del 11,6% a ritmo anual, y del 3% respecto al trimestre anterior, según un sondeo realizado por el diario Nikkei entre 22 especialistas.

La caída se explica esencialmente por un hundimiento de las exportaciones (-45% en un año) y de la inversión privada no residencial (-19,5%), categoría que viene a corresponder al gasto de las empresas en capital. El consumo de las familias ha disminuido a su vez un 1,7%.

Al final, la demanda exterior ha tenido un impacto negativo de tres puntos porcentuales, y la demanda interna de 0,3% en el crecimiento japonés durante el cuarto trimestre.

En recesión

Japón se encuentra oficialmente en recesión desde el tercer trimestre de 2008, cuando su economía retrocedió un 0,6% respecto al trimestre precedente, después de una contracción del 0,9% el segundo trimestre, según estadísticas revisadas difundidas también este lunes.

Alimentado mucho tiempo por la demanda de automóviles, aparatos electrónicos y otros bienes de consumo japoneses de alto valor añadido en Estados Unidos, el crecimiento nipón sufrió un frenazo brutal con la caída del consumo al otro lado del Pacífico.

El mercado interior japonés, que lleva años vegetando por factores por el envejecimiento de la población o el estancamiento salarial, se ha visto incapaz de tomar el relevo.

Para el conjunto del año 2008, el PIB japonés pierde un 0,7%, su peor resultado anual desde 1998 (-2%) y el primero negativo desde 1999 (-0,1%), precisó el Gobierno.

"La peor desde la Segunda Guerra Mundial"

"Esta es la peor crisis desde el final de la guerra. No cabe duda", declaró el ministro de Política Económica y Presupuestaria, Kaoru Yosano, en conferencia de prensa.

"La economía japonesa, cuyo crecimiento depende mucho de las exportaciones de automóviles, maquinaria y equipos de información, ha quedado literalmente arrasada" por la crisis, estimó Yosano.

"Japón será incapaz de superarla solo. Las fronteras no existen en economía. La nuestra arrancará de nuevo al mismo tiempo que en los otros países", agregó el ministro, para quien "reconstruir nuestra economía es una cuestión de responsabilidad frente a los otros países".

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