
La Junta de Andalucía ha reaccionado a la carta que recibido estos días del Ministerio de Hacienda, en la que se le conmina a presentar un plan de ajuste por haber incumplido la deuda y la regla de gasto del ejercicio presupuestario de 2018. Después de conocer el contenido, considerado por el ejecutivo popular-ciudadano de "político y arbitrario", no descarta recurrir ante la justicia las directrices del Gobierno, aunque de momento va a solicitar una reunión urgente con el Ministerio de Hacienda para revertir la situación, además de una comparecencia urgente de la titular de Hacienda, en el Congreso, para que explique el por qué de esta decisión que afecta a una comunidad que ha presentado unos presupuestos con déficit cero, con cuenta con plan de mercado que se financia con menor interés que en 2018, que también cuenta con el visto bueno de las agencias de calificación y, con el la Asociación Analistas Financieros de Andalucía.
La carta, enviada por la Secretaría de Financiación Autonómica del Ministerio, está fechada el 5 de diciembre, aunque en efecto llegó a la Junta el 11 de diciembre. Recibido el documento, la misma fue evaluada el viernes pasado, ante la estupefacción de que una actuación como ésta no haya cumplido los requisitos obligatorios de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, según la cual primero hay que hacer un requerimiento a la administración competente, y esta no viene de un tercer nivel, sino de un presidente del Gobierno o de un ministro.
En primera instancia, habiendo examinado que la comunicación alude al ejercicio presupuestario de 2018, año completo en el que gobernó Susana Díaz, con María Jesús Montero como consejera de Hacienda, al menos hasta junio, el Gobierno andaluz que preside Juan Manuel Moreno Bonilla solicita una entrevista urgente con el ministerio para encauzar la situación que podría impedir a la nueva administración andaluza salir a los mercados para financiarse y pagar su deuda.
Recuerdan fuentes de la Consejería de Hacienda que, en octubre de 2019 ya se conocía que la gestión de Susana Díaz había dejado el año 2018 en estos términos de deuda y de incumplimiento de la regla de gasto, y sin embargo ha sido ahora, al finalizar el año, y por un tercer nival, sin requerimiento y sin llamada del ministerio, como se les ha comunicado esta decisión.
Este martes, Moreno Bonilla volverá a poner en la mesa la carta de marras para estudiar en el Consejo de Gobierno las actuaciones a seguir, con el fin de evitar que Andalucía tenga sus cuentas intervenidas. De momento, la Junta está pendiente de enviar su plan de estabilidad, a la espera de que el Consejo de Política Fiscal y Financiera haga la convocatoria pertinente, que no acaba de llegar. El equipo de Moreno Bonilla y de Juan Marín quiere escuchar las explicaciones pertinentes y técnicas de la ministra Montero, ya que en su opinión, si bien la ley prevé la intervención de unas cuentas, no se entiende que lo haga ahora sobre un ejercicio que afectó al anterior equipo socialista, y cuando los nuevos presupuestos están sujetos a un déficit cero.
"Técnicamente es muy complejo quitar la financiación que recibimos, con un plan de mercados que funciona", comentan a elEconomista. Además, "es sabido que salir a los mercados hace falta un año y medio, pero cuando te vas, es muy difícil volver, ahora que Andalucía da buenos parámetros económicos, y los inversores empiezan a tener confianza sobre nuestra región", subrayan. "Con esta decisión -subrayan-, el Gobierno de Pedro Sánchez se puede cargar el trabajo de una legislatura en la que por fin se crea empleo, siendo la primera comunidad de España que está a punto de cerrar los Presupuestos de 2020".