En septiembre de 2017, el piloto de pruebas de Porsche Lars Kern firmó la vuelta más rápida de un coche de producción en 'El Infierno Verde' a los mandos de un Porsche 911 GT2 RS, parando el cronometro en 6:47.3. Un récord que mantuvo hasta julio de este año cuando Lamborghini pulverizó la marca con su modelo más rápido, el Aventador SVJ (6:44.97).
No obstante, ahora la marca de Sttutgart, lejos de amilanarse, ha tirado de pundonor para volver a recuperar la plusmarca en el circuito de Nürburgring-Nordschleife junto con Manthey-Racing, rebajando el tiempo hasta 6:40.3 minutos.
El coche empleado para la gesta, que se certificó el pasado 25 de octubre con Kern al volante, ha sido un Porsche GT2 RS MR (Manthey-Racing) con 700 CV de potencia y un par de 750 Nm aderezados con diversas modificaciones en el chasis y la aerodinámica.

"La conducción ha sido muy divertida", comentó tras el test Lars Kern. "El equilibrio del vehículo también es muy bueno con el nuevo kit. No he tomado grandes riesgos para ir deprisa. Sólo he tenido un intento, porque ya empezaba a oscurecer, pero ha funcionado a la primera", explicó.
Cabe recordar que el Porsche 911 GT2 RS, el más rápido y potente de la gama, hizo su estreno mundial en Goodwood, Reino Unido, en junio de 2017. El motor de 3.8 litros tiene 700 caballos de potencia y un par de 750 Nm. La velocidad máxima de este deportivo de tracción trasera es de 340 km/h. Su peso es de sólo 1.470 kilogramos y acelera de 0 a 100 km/h en apenas 2,8 segundos.