El conductor que falleció el pasado marzo en California a bordo de un Tesla Model X con el sistema de conducción semiautónoma activado no tenía las manos en el volante en los seis segundos previos a la colisión pese a los avisos emitidos por el coche, que aceleró justo antes del impacto, según ha determinado el Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte de EEUU (NTSB, en inglés) en su informe preliminar.
Walter Huang falleció el 23 de marzo después de que el SUV Model X que conducía por la autopista 101, cerca de Mountain View, colisionase con una barrera y fuese golpeado por otros dos vehículos.
La NTSB explicó que el conductor, de 38 años, recibió dos alertas visuales y una auditiva para que colocara sus manos en el volante durante el viaje, pero no lo hizo. Además, indicó que Huang recibió advertencias para que volviera a poner sus manos sobre el volante más de 15 minutos antes del accidente.
En el minuto anterior a la colisión, agarró el volante un total de 34 segundos, pero no en los últimos seis antes de chocar.
El informe también destaca que el vehículo aceleró repentinamente de 62 millas por hora (99 km/h) por hora a casi 71 mph (114 km/h) en los tres segundos previos al accidente, por encima de la velocidad de 65 mph (105 km/h) por hora permitidos.
El Autopilot de Tesla es un sistema de asistencia al conductor que maneja algunas tareas de conducción y que permite que el piloto retire las manos del volante en algún momento. Sin embargo, la compañía sostiene que los conductores deben manejar el volante cuando usan esta tecnología.
Una semana después del siniestro, el fabricante estadounidense responsabilizó al conductor de lo ocurrido. Aseguró que el piloto automático del vehículo estaba activado en los momentos previos de la colisión y que no se detectaron las manos del conductor sobre el volante en los seis segundos anteriores al choque.
"El accidente sucedió en un día despejado con (...) visibilidad, lo que significa que la única forma en la que pudo ocurrir es que el señor Huang no estuviese prestando atención a la carretera, pese a que el coche le hiciese varias advertencias para que la prestara", señaló entonces en un comunicado un portavoz de Tesla.
Después del accidente, la familia del fallecido contrató a un equipo legal con el propósito de demandar a Tesla al considerar que su sistema no funciona apropiadamente.
