El uso del smartphone mientras se camina por la calle es un hecho cada vez más usual, tanto que se ha convertido en una amenaza para los viandantes a la hora de cruzar la calzada. A fin de aminorar riesgos, el municipio holandés Bodengraven-Reewijk ha instalado semáforos en el suelo para alertar a los adictos al móvil. | España se encuentra entre los diez países donde más usos se le da a los smartphones.
Por el momento está en fase de pruebas, pero en el nuevo sistema de regulación de tránsito de peatones ya luce una banda de LED que se extiende en la acera horizontalmente -visible tanto de día como de noche- y cambia de rojo a verde acorde al semáforo. Además, antes de pasar de un color a otro, parpadea para captar la atención de los 'zombis' de los smartphones.
Hig Traffic System es la entidad que se ha encargado del desarrollo de este proyecto que ha sido bautizado como '+ Light Line', el cual por el momento se ha instalado en cruces cercanos a varios colegios. Asimismo, esperan ir extendiendo a más municipios holandeses con el paso del tiempo.
Si bien, se trata de una iniciativa preventiva y práctica, pero no novedosa. La muerte de una adolescente en Múnich tras ser arrollada por un tranvía, al que no vio ni oyó llegar a causa de los cascos de audio que portaba mientras usaba el móvil, impulsó la medida en Alemania. De esta forma, Colonia y Augsburgo se convirtieron en las primeras ciudades en incorporar los semáforos para adictos al smartphone.
En España también se ha estrenado ya esta tecnología, en concreto, en Sant Cugat del Vallès (Barcelona), donde se instaló una franja de luces LED de color rojo situada a ambos lados del semáforo de la plaza Quatre Cantons de la localidad - el que regula un mayor paso de gente -. La iniciativa supuso una inversión de 5.000 euros. Elche, por su parte, también cuenta con un semáforo de estas características.
