
McLaren ha puesto fecha de caducidad a los clásicos motores de combustión: 2025. A partir de entonces, la firma de Woking (Inglaterra) ofrecerá el 100% de su gama con sistemas de propulsión híbridos para posteriormente dar el salto al eléctrico puro.
En declaraciones a AutoExpress, Mike Flewitt, CEO de McLaren, explica que su objetivo es que "todos nuestros coches sean híbridos en 2025 porque es la única forma de cumplir con los futuros límites de emisiones". Asimismo, reconoció que el coche eléctrico es el rumbo que debe seguir McLaren y la industria en su conjunto, por lo que es el siguiente paso que dará la marca.
Esta hibridación, no obstante, no será repentina ni inmediata. De hecho, el nuevo modelo que presentará la marca en el Salón de Ginebra, el McLaren 720 S, no contará con ninguna de estas mecánicas 'limpias'.
La entidad se adapta así al cambio de rumbo en la motorización que está experimentando el sector hacia unas tecnologías más cuidadosas con el medioambiente. Tanto es así que recientemente anunció un acuerdo con BMW para elaborar de forma conjunta motores más eficientes, una colaboración que rememoró la década de los 90 cuando ambas entidades crearon el emblemático McLaren F1.
Por otra parte, desde Woking apuestan por reducir el tamaño de sus motores -el controvertido 'downsizing'-, con lo que su actual V8 3.8 biturbo podría menguar a un V8 de menor capacidad o, incluso, ser sustituido por un V6. "En pocos años se verá un cambio en el equilibrio de poder entre el motor de combustión y los motores eléctricos", agregó Flewitt.