
En un mundo en el que la industria del automóvil es global y está controlada por unas pocas compañías gigantes, ¿es posible que un fabricante surgido en el África subshariana encuentre un nicho de mercado en el ámbito local? Eso es lo que está intentado en Ghana Kwadwo Safo Kantanka.
Kantanka, apodado el 'Apóstol' por su condición de líder religioso en Accra, la capital del país, ha conseguido al fin cumplir su sueño de desarrollar y comercializar vehículos 'made in Ghana': su gama de todoterrenos y pick-ups le ha puesto en el foco de los medios de comunicación ghaneses, gracias en buena parte a una campaña protagonizada por estrellas del cine y la música locales.
El precio de entrada a sus vehículos oscila entre los 18.000 y los 35.000 dólares, cifra que está fuera del alcance de la mayoría de la población en Ghana, pero Kantanka ya tiene en sus planes lanzar el próximo año una berlina más compacta y económica que impulse su negocio en el país.
Ghana tiene un mercado que cierra alrededor de 12.000 operaciones de compra-venta de coches nuevos cada año y unas 100.000 de vehículos de segunda mano. Por eso, Kwado Safo junior, hijo del 'Apostol' y director ejecutivo del Grupo Kantanka, sabe que la demanda está ahí y confía en que la empresa puede aguantar en la competencia con las marcas globales que operan en Ghana. "Ya tenemos ciertas empresas en Ghana que han venido a hacer ciertos pedidos escandalosos con grandes números que tenemos que cumplir. Por lo tanto, estamos trabajando", confirma Safo sin dar más detalles.
Identidad local
Kantanka, además, va a tener cierta ayuda por parte del gobierno del Ghana. El presidente John Dramani Mahama lleva un tiempo animando a a sus compatriotas a comprar localmente para impulsar una débil economía golpeada por la inflación, la depreciación de la moneda y la alta deuda del sector público.
Dramani ha llegado a señalar el año pasado que se habían gastado unos 1.500 millones de dólares en productos como arroz, azúcar o aceite de importación "que podría haber ido al bolsillo de empresarios ghaneses". "Cualquier artículo de importación que compramos como ghaneses constituye una exportación de puestos de trabajo en este país, sobre todo en los puntos en los que tenemos ventajas competitivas para producir", dijo en ese momento.
Kantanka importa algunos componentes clave para su producción como vidrio, llantas o pinzas de freno, pero el aprovisionamiento local sigue siendo el principal en el ensamblaje de vehículos de Kantanka, cuyas parrillas en el frontal presentan el emblema estrella de cinco puntas de Ghana; la madera de los bosques de Ghana, por ejemplo, se utiliza para fabricar paneles de control, mientras que los asientos de cuero de su SUV se producen en la segunda ciudad comercial más grande del país, Kumasi.
Pero Kantanka no pretende proyectar la identidad local solo a golpe de economía, sino que va más allá incluyendo, por ejemplo, la lengua Akan, ampliamente utilizada en Ghana, junto al inglés en la oferta del sistema electrónico.
¿Un nuevo Toyota?
Safo, máximo responsable actual en Kantanka, es inflexible acerca de la singularidad de sus coches, cuya seguridad ha sido aprobada en todos sus modelos por la Autoridad de Licencias de Vehículos de Conductores de Ghana.
La etiqueta 'made in Ghana' significa que "si tiene algún problema con el vehículo, usted no tendría que importar de la India o China o Estados Unidos. Todas las piezas están aquí y tenemos un servicio de 24 horas", asegura.
Hace seis meses, el servicio policial de Ghana recibió una de las camionetas pick-up del fabricante local, lo cual se espera podría allanar el camino para que otras instituciones gubernamentales se animen a realizar pedidos. Kantanka es optimista sobre el camino a seguir.
"El futuro de Kantanka para los próximos diez años es intentar en la medida en que sea posible aumentar nuestras líneas", dice Safo. A las actuales tres líneas, "tenemos la intención de añadir el próximo año dos líneas más. Tenemos la intención de entrar en más productos como autobuses, furgonetas y todo eso".
Para los ghaneses, los coches de Kantanka podrían poner a su nación en el mapa. "Debemos creer en los coches ghaneses como en los Toyotas y Hyundais", asegura Murtala Mohammed, un ghanés que vive en Accra. "Todos ellos empezaron desde cero. ¿Quién sabe? Kantaka podría ser el próximo Toyota."