
El Toyota Supra naranja que conducía el actor Paul Walker en la primera película de la saga Fast & Furious será subastado en mayo por la casa Mecum Actions con un precio de salida de 200.000 dólares (algo más de 185.000 dólares al cambio actual).
La subasta de este coche tiene un componente emocional después de que el actor que interpreta al policía secreta Brian O'Conner, protagonista del título, falleciera hace un año y medio precisamente en un accidente de coche.
Según describe la casa de subastas que ofrece el vehículo, el Toyota Supra conserva todas las piezas originales tal y como sale en la película, una unidad desarrollada por Eddie Paul at The Shark Shop, quien fue el encargado de tunear el coche.
Por fuera, esta unidad no deja de ser un Toyota Supra de la época tuneado con vinilos, pero en el interior sí presenta varios cambios como los asientos de tipo bucket de competición, la jaula interior o el desproporcionado alerón trasero, variaciones que se hicieron para mantener el coche al suelo incluso con el aumento de potencia a través del óxido nitroso.
Este Toyota Supra que condujo Paul Walker será subastado en el evento que celebrará la casa Mecum Actions entre los próximos 12 y 17 de mayo.