
El Gobierno seguirá adelante con su plan y materializará el incremento del impuesto de matriculación en enero de 2022.
Así lo confirmó el pasado jueves la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario donde presentó el proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año 2022. "La prórroga, que se había incorporado a la Ley de Presupuestos para la entrada en vigor era hasta el 31 de diciembre de 2021. Eso continuará hasta esa fecha, pero no incorporamos ningún elemento más. Cuando termine el año, se activa la Ley que había anteriormente que pretende regular esta materia con mucha más eficacia de la que tenemos actualmente", aseguró Montero.
Este aumento, conocido por el sector desde que entró en vigor la congelación del tributo en julio de este año, llegará en un momento en el cual las ventas de vehículos todavía no habrán recuperado los niveles previos a la pandemia. En lo que va de año, las matriculaciones de vehículos se han incrementado un 8,8% en tasa interanual, hasta las 647.955 unidades, pero si se compara con los datos de 2019, las ventas acumuladas caen un 33%.
Posibles enmiendas
No obstante, la titular de la cartera de Hacienda confirmó que esto seguirá adelante pensando que el proyecto de Presupuestos no sufra enmiendas. Y es que eso fue lo que sucedió este año: una enmienda impulsada por el PDeCat en la Ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. En su documento, el PDeCat buscaba un cambio en los tramos de aplicación del impuesto de matriculación para revertir la subida llevada a cabo el pasado 1 de enero, cuando se incrementó el precio medio de los vehículos nuevos como consecuencia de la nueva legislación ambiental.
"La entrada en vigor de la normativa WLTP (más estricta) supondrá un aumento en el valor de emisiones oficiales, ya que el dato es aproximadamente un 20% superior al vigente. De no corregirse esta modificación de carácter estrictamente técnico, en España el impuesto de matriculación se vería inmediatamente incrementado y, además, para muchos modelos supondría perder la actual bonificación del impuesto", reza el texto, que ya fue presentado a finales de 2020.

Asimismo, el portavoz del PDeCat en el Congreso, Ferrán Bel, indicó cuando se congeló el pasado mes de julio que, si el mercado continúa sufriendo las consecuencias de la pandemia, más adelante volverá a presentar una enmienda para mantener el impuesto de matriculación a niveles de 2020.
Desde la patronal de concesionarios (Faconauto) aseguran a elEconomista que esta alza "supondrá en este momento un serio problema, ya que se desmovilizará a muchos clientes, como ya pasó en los primeros meses de este año". Además, consideran que "vendrá a unirse a los problemas ya conocidos: falta de stock por la crisis de los chips y la inseguridad existente entre los compradores en esta transición hacia la descarbonización del parque". Asimismo, recuerdan que esta alza "recaerá en el ciudadano medio".
Por su parte, el presidente de la patronal de la distribución (Ganvam), Raúl Palacios, ha afirmado a este periódico que "es importante extender la moratoria del cambio del impuesto de matriculación, al menos, hasta diciembre del año que viene porque el mercado está muy lejos de recuperar la normalidad, registrando niveles raquíticos. A una situación coyuntural de incertidumbre económica se ha sumado la crisis de los chips, que es global y que puede alargarse hasta 2023".
Las ventas, hundidas por la falta de chips y sin previsión de mejora
La escasez mundial de chips, que afecta a la industria desde finales de 2020 y que está prevista que se alargue hasta mediados de 2022, está provocando paradas en las fábricas y falta de stock en los concesionarios. De hecho, el presidente de la patronal de fabricantes (Anfac), José Vicente de los Mozos, pidió la semana pasada al Gobierno generar confianza en el consumidor con el objetivo de proteger la industria del automóvil. Según las previsiones de Anfac, el año cerrará con un total de 900.000 unidades, un 25% menos que en 2019.