El consejero delegado de Renault, Luca de Meo, advierte de que el precio de los coches nuevos va a subir con las nuevas reglamentaciones pero se marca como desafío equiparar los costos de los motores de combustión con los eléctricos en el horizonte de 2025-2026.
En una entrevista publicada este jueves por Le Parisien, De Meo reconoce que "los coches van a ser más caros, hay que aceptarlo". Eso significará -avisa- que habrá personas que no podrán comprarse un coche nuevo.
Por eso dice que Renault trabaja en el reacondicionamiento de vehículos y hace notar que el mercado de la segunda mano se ha disparado en Europa.
El consejero delegado subraya, además, que su empresa ya consigue ofrecer coches eléctricos en "zonas de precio accesible" y que el reto ahora es rentabilizar esas nuevas tecnologías.
Anticipa que conforme los motores de combustión se encarezcan por el endurecimiento de las normas de contaminación y conforme baje el costo de los eléctricos, "a partir de 2025 o 2026" los precios de unos y otros tenderán a equipararse.
Masificar la producción de eléctricos
La compañía francesa pretende masificar la producción de vehículos eléctricos y por eso va a constituir una plataforma con varias plantas dedicadas a esa tecnología en el norte de Francia, incluida una fábrica de baterías, para la que se espera el anuncio de un socio industrial en las próximas semanas.
De Meo insiste en la pertinencia de su plan estratégico presentado en enero y bautizado Renaulution, "orientado hacia el mercado y hacia los clientes".
Se trata, entre otras cosas, de "hacer más ágil la organización" y reorientar el foco, que durante el mandato de Carlos Ghosn al frente de Renault estaba centrado en conseguir los mayores volúmenes posibles. "Nuestra responsabilidad ahora -explica- es ir a buscar el valor sin estar obsesionado por la cantidad".