
El Plan Renove impulsado por el Gobierno no termina de arrancar. De estas ayudas, anunciadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez en el Plan de impulso a la cadena de valor del sector de la automoción a mediados de junio, que cuentan con una dotación presupuestaria de 250 millones de euros, solo se han gastado 28.071.400 euros, lo que supone el 11,2% del total, según datos a los que ha tenido acceso elEconomista. | Guía para particulares y autónomos para pedir las ayudas del Plan Renove a la compra de un coche
Del montante total, 230 millones están destinados a la adquisición de turismos, furgonetas ligeras y motocicletas, mientras que los otros 20 millones son para la compra de vehículos industriales y autobuses.
De estas partidas presupuestarias, el montante destinado a la compra de turismos asciende a los 200 millones de euros, de los cuales tan solo se han asignado 18.166.850 euros, es decir, el 9% del total. En el caso de las furgonetas ligeras, con un presupuesto de 25 millones de euros, solo se han empleado 1.407.450 euros, es decir, un 5,6%. Para la compra de motocicletas, las cuales contaban con un presupuesto de 5 millones de euros, solo se han entregado 1.469.100, un 29,3% del total. En el caso de las adquisiciones de vehículos industriales se han incentivado con 7.028.000 euros, el 35,1% del total.
Lo preocupante es que la vigencia de este programa de incentivos finaliza el 31 de diciembre, una situación que hace entrever el problema al que se han tenido que enfrentar los solicitantes de estas ayudas. Y es que en esta ocasión han sido los compradores los encargados de gestionarlas y no los concesionarios, tal y como pasaba con los anteriores Planes PIVE.
El Gobierno aprobó estas medidas en un Consejo de Ministros extraordinario a principios de julio, al tiempo que dichas ayudas se publicaron en el BOE del 6 de julio. Pese a ello, hubo que esperar hasta el 20 de octubre para que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo abriese el plazo para solicitar estos incentivos.
Casi un mes después, el 10 de noviembre, el Ministerio de Industria habilitó en la sede electrónica el cuestionario en el que se ha de añadir la documentación necesaria para solicitar las ayudas y validar, de esta forma, la reserva de crédito correspondiente a la ayuda pedida por la compra de vehículo que se ha de requerir con anterioridad desde que el 20 de octubre se habilitase el proceso.
Distintos comportamientos
Lo cierto es que el ejercicio 2020 se ha visto seriamente afectado por la pandemia. De esta manera, las matriculaciones de turismos nuevos acumulan una caída del 35,3% entre enero y noviembre. De hecho, julio fue el único mes del año que ha registrado incrementos en las entregas de vehículos, con un alza del 1,1% en tasa interanual, hasta las 117.929 unidades, según datos de las patronales de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y distribuidores (Ganvam).
Desde Faconauto aseguran a elEconomista que "la recaída en la situación sanitaria ha frenado el impulso tan positivo que el Plan Renove dio a las matriculaciones en los meses de verano. Después, las restricciones a la movilidad y los confinamientos selectivos han impactado negativamente en el desarrollo del mercado, incluso con el Renove en marcha. Sin embargo, el Renove ha sido esencial para recuperar las matriculaciones y es la vía a seguir para impulsar la recuperación de cara al año que viene".
Los vehículos comerciales ligeros, por su parte, han vivido una situación distinta. Así, este tipo de modelos registró aumentos en julio, un 2,9% más en tasa interanual, y en septiembre, un 7,4% más. De igual manera, los vehículos industriales también incrementaron sus ventas en julio y septiembre, con subidas del 2% y del 1,3% en tasa interanual, respectivamente.
El presidente de Ganvam, Raúl Palacios, ha asegurado a este periódico que las razones por las que no termina de arrancar el Plan Renove son tres: "el retraso en la puesta en marcha de la herramienta, dejar en manos del comprador de la solicitud y que el incentivo para los vehículos etiqueta 'C' es reducido y, por desgracia, se obtiene más revendiendo el vehículo antiguo en el mercado de segunda mano que entregándolo para achatarrar".
Tal es así que la ayuda para los modelos de combustión interna parte de los 400 euros, mientras que la venta de un Seat Ibiza de 15 años y con un motor diésel 1.4 TDI de 80 CV de potencia y tres puertas se sitúa en los 1.120 euros, casi tres veces más que el incentivo del Gobierno.
En cuanto a las matriculaciones de motos, estas crecieron en julio (20,3%), agosto (29,1%) y septiembre (3,2%), según datos de la patronal Anesdor. Para la adquisición de motocicletas convencionales, con un precio máximo antes de impuestos de 8.000 euros, se conceden 400 euros de ayuda al comprador. Esta cantidad se eleva a 750 euros en el caso de motocicletas eléctricas, con los requisitos de que no supere los 10.000 euros, tenga más de 3kw de potencia y una autonomía superior a los 70 kilómetros.
Desde la asociación aseguran que el margen presupuestario de 3,5 millones de euros aún permite que 9.000 compradores se acojan a esta subvención ofrecida por el Gobierno.
Según apunta a este medio el secretario general de Anesdor, José María Riaño, "el Plan Renove ha sido muy positivo para el sector. Tras el confinamiento los ciudadanos han apostado por la moto y durante varios meses el crecimiento fue superior al 10%. Es una realidad que la llegada de la segunda ola ha coincidido con la apertura de las solicitudes. Esto ha provocado una reducción de las ventas y ha influido en la solicitud de las ayudas. No obstante, confiamos en que en el mes que queda aumenten las peticiones".
Hasta el pasado 10 de noviembre, se realizaron unas 15.000 operaciones de reserva de crédito.