
Las distintas fórmulas de movilidad existentes en la actualidad también suponen varias alternativas para los autónomos. Tan es así que más de ocho de cada diez trabajadores por cuenta propia buscan alternativas de movilidad distintas a la compra de un vehículo nuevo, como puede ser la adquisición de un modelo usado o la firma de un contrato de renting. | El precio del renting de vehículos varía un 77% en función de la compañía contratada, según OCU
Vehículos usados y renting
De hecho, según un informe de OcasiónPlus, un 42% de los autónomos prefiere adquirir un vehículo de ocasión frente a un vehículo nuevo, mientras que otro 40% se decanta por la firma de un contrato de renting.
Las causas de estas preferencias radican en la posibilidad de deducirse los distintos gravámenes que están sujetos a su actividad. Así, los autónomos buscan opciones baratas y que les permita acogerse a este tipo de deducciones.
Y es que los trabajadores por cuenta propia buscan poder deducirse una parte o la totalidad del IVA soportado que tiene el vehículo, como la gasolina o los gastos de reparación.
De esta manera, los autónomos pueden deducir el 50% de la cuota soportada y, mientras que en caso de ser utilizado para uso personal, el IVA no será deducible.
Por eso, muchos autónomos buscan opciones baratas y que les permita acogerse a este requisito. Estos vehículos serán usados para transporte de mercancías, para movilidad de profesionales, para autoescuelas o taxis, entre otros.
Por el contrario, en caso de decantarse por la compra de un modelo nuevo, tan sólo un 18% de los autónomos se acoge a esta opción.
El diésel: elección prioritaria
En cuanto a las motorizaciones que eligen los autónomos, el 88% se decanta por propulsores diésel, debido a su menor consumo y, por ende, menor gasto. Y es que el diésel, al contrario que las motorizaciones de gasolina, ofrecen un mayor rendimiento a los conductores que recorren varios kilómetros, una condición que cumplen los autónomos.
En cuanto al resto de preferencias por parte de los autónomos, un 10% antepone los propulsores de gasolina al no hacer tantos kilómetros con el vehículo, mientras que el 2% restante opta por coches con etiqueta ECO o cero emisiones.