
El modelo híbrido ya es una realidad en los centros de formación. El campus de Berklee en Valencia (España) ya ha comenzado el semestre de otoño dando la bienvenida a 122 estudiantes de 30 países. Esta metodología combina el aprendizaje en persona con cursos dinámicos a distancia. María Martínez, Directora Ejecutiva de Berklee en Valencia, explica cómo se ha llevado a cabo la reapertura.
¿Cómo reaccionó el campus de Berklee en Valencia a la llegada de la Pandemia?
Tuvimos que reaccionar con rapidez y aprovechamos el spring break, que fue justo la semana siguiente a la declaración del Estado de Alarma, para hacer el cambio a remoto. En esos días preparamos toda la infraestructura tecnológica y procedimos a formar a los profesores y preparar a los alumnos. Aunque la parte más compleja fue preparar la vuelta a casa, en cuestión de días, de los más de 150 alumnos de grado que teníamos en el campus, a sus respectivos países.
¿De qué forma han podido seguir los estudiantes su formación?
Desde mediados de marzo hasta final de curso la formación ha sido entera en remoto. Aunque algunos estudiantes de máster decidieron quedarse en Valencia, las medidas impuestas por las autoridades sanitarias nos obligaron a retomar la actividad en remoto.
¿Cómo se ha preparado Berklee para este inicio de curso?
A conciencia. Ha sido una verdadera apuesta abrir en formato híbrido con el objetivo de primar la seguridad de nuestra comunidad maximizando lo presencial. El campus ha sufrido una transformación para adaptarse a las recomendaciones de las autoridades sanitarias y se han establecido nuevos protocolos para alumnos, profesorado y personal administrativo.
¿Con qué medidas de seguridad y sanitarias cuenta la escuela para ofrecer una formación segura?
Son muchas las medidas que se han implementado pero estamos siguiendo, e incluso en algunos casos yendo un poco más allá, las recomendaciones que el ministerio ha establecido para los centro universitarios. Todo lo que han acordado las autoridades sanitarias del gobierno valenciano con las cinco universidades de la comunidad, Berklee lo ha aplicado. En nuestro caso hemos marcado dos metros de distancia social en lugar del metro y medio recomendado. Para la parte docente y lectiva se han tenido en cuenta los informes de las principales instituciones del sector como la NFHS (National Federation of State High Schools Associations). De hecho se han establecido tres nuevos protocolos, uno para alumnos, otro para personal administrativo y profesorado y un tercero para el correcto uso de las instalaciones, estudios y material lectivo.
¿En qué consistirá exactamente el modelo híbrido de Berklee?
Consiste en primar lo presencial, esto es, procurar el máximo número de horas lectivas en el campus. Únicamente se opta por el remoto si no hay opción de llevar a cabo las clases en el campus.
¿Cómo se han preparado los docentes para este nuevo proceso de enseñanza?
La verdad es que el final del curso anterior ha sido un aprendizaje para todos y para ellos también. La experiencia de los últimos meses nos ha ayudado en gran medida para el inicio de este curso. Con el paso a remoto el semestre pasado, se aprovechó el spring break para formar intensamente a todos los profesores en el manejo de las plataformas tecnológicas necesarias para dar clases a distancia. También se ha trabajado en preparar sus hogares como estudios de grabación. Ahora toca adaptarse a las mascarillas y otros elementos que implican procesos distintos a los que se tenían en el campus el curso pasado, como la desinfección de materiales o el hecho de tener a parte de la clase en persona y a otra en remoto. Lo más importante es seguir generando un entorno de aprendizaje rico y estimulante.
Uno de los puntos fuertes de la escuela son los conciertos, ¿cómo se plantearán a partir de ahora?
Ya hemos realizado dos en colaboración con la Ciutat de les Arts i les Ciencies, siguiendo las recomendaciones establecidas, y han funcionado muy bien. Nuestros estudiantes llevan mascarilla en todo momento mientras actúan, el escenario se ha ampliado para preservar la distancia social, cada cantante dispone de su propio micrófono personal que no se comparte en ningún momento y se desinfectan todos los elementos del escenario, según marcan las directrices. Se perciben las ganas que tiene la gente de oír música en directo a pesar de que la distancia social que debemos cumplir hace que irremediablemente el aforo sea más limitado y afecte a la hora de percibir el calor del público. Pero todos entendemos que es por seguridad de todos y ojalá sirva para recuperar el pulso del sector que se está viendo muy perjudicado por la pandemia.
La internacionalización es parte indiscutible del ADN de Berklee, ¿cómo tienen preparada la llegada de estudiantes extranjeros?
Este primer semestre de otoño tenemos más de 120 estudiantes de posgrado. Proceden de 30 países y muchos de ellos ya están en Valencia. Los que aún no han llegado se debe principalmente a temas de visados. A todos ellos se les ha explicado en qué iba a consistir el formato híbrido antes de llegar y se han tenido sesiones online con ellos para tenerles informados de cómo estaba la situación en Valencia y responder a sus dudas.
¿Qué novedades tiene el centro para este curso académico?
No son pocas, la verdad. Para empezar, el factor remoto va a permitir a nuestros estudiantes de Valencia acceder a muchos más contenidos ofrecidos por la sede central de Boston. Entre otros, a las clases magistrales con artistas y ponentes que se ofrecen allí. Y lo mismo a la inversa, es decir, dar acceso a los contenidos de Valencia a los alumnos de Boston. El remoto nos permite disponer este año de más artistas e invitados que anteriormente no tenían la posibilidad de venir a dar una clase magistral. En definitiva, el alumnado sale ganando, que es el objetivo principal.