
La salud y la economía se han visto dañadas en los últimos meses por la aparición de la Covid-19, que impuso un confinamiento obligatorio con la paralización de todos los sectores de la sociedad. De una educación totalmente presencial, en un tiempo récord el sistema educativo y universitario se adaptó a las nuevas circunstancias para ofrecer a los estudiantes una formación de calidad de forma virtual. Sin embargo, la economía de las familias se ha visto más dañada que otros años, lo que impide a muchos estudiantes pagar el coste de la matrícula en su totalidad.
Desde el inicio de la pandemia, son muchas las universidades que han recibido numerosas solicitudes de cancelación de la matrícula. Concretamente, la Universidad de Sevilla recibió 7.732, que corresponden a 4.007 estudiantes, lo que significa que cada persona afectada ha pedido de media la anulación de dos asignaturas. Las principales razones acreditadas por los universitarios para la cancelación parcial de matrícula han sido el ERTE o fallecimiento por Covid-19 de algún miembro de la unidad familiar. Un número importante de las asignaturas anuladas son trabajos fin de estudios y prácticas externas que no se han podido realizar con motivo del Estado de Alarma.
La UMA subvenciona el coste
Esta situación se ha vivido en muchas universidades españolas. Ante un escenario tan atípico, la Universidad de Málaga se puso también del lado de los alumnos y subvencionó el coste de matrícula de 261 estudiantes que alegaron una situación de emergencia sobrevenida como consecuencia de la crisis. La ayuda que reciben estos alumnos es de un 80% del coste de la matrícula y el resto lo podrán pagar en dos plazos.
La UMA puso en marcha una serie de acciones para ayudar a sus alumnos, entre las que se encuentra esta ayuda de emergencia. En condiciones normales, la ayuda de matrícula se solicita hasta finales de enero, pero por las circunstancias actuales, la universidad acordó una nueva convocatoria, que finalizó el pasado 31 de mayo.
Además, la UMA concede otras ayudas a alumnos con pocos recursos para el alojamiento o la manutención. Hasta la pandemia habían sido aprobadas 22 solicitudes y en la ampliación del plazo, 239 más. El importe total de las ayudas de la UMA asciende a 121.000 euros, cuando el presupuesto de las ayudas de emergencia es de 45.000 euros, que por lo general no se agotaba.
Otra de las medidas de apoyo social que ha llevado a cabo esta institución ha sido aplazar el pago de la matrícula de los alumnos que habían solicitado el fraccionamiento en ocho mensualidades, que se abonan entre los meses de noviembre y mayo. La institución educativa no pasó el recibo correspondiente a los meses de marzo, abril y mayo.