
El peso de los productos frescos en la cesta de la compra de los consumidores españoles está frenando el crecimiento de las ventas online en el sector del gran consumo. Así se desprende de un informe de la consultora Kantar Worldpanel, que recuerda que en nuestro país la mitad del gasto que hacen los hogares en alimentación va precisamente destinado a frutas, pescados, carnes, hortalizas y lácteos. Productos que los compradores nacionales prefieren seguir haciendo en las tiendas físicas y no tanto a través de clicks. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Alimentación
Tanto es así que la cuota de mercado de los productos frescos en el comercio online es sólo del 0,5%. Además de querer ver o tocar los frescos antes de echarlos al carro de la compra, los españoles, al igual que en el resto del mundo, también han de superar algunas de las barreras con las que cuenta el comercio online para triunfar. Algunas de ellas son los sistemas de pagos, que no gozan ni mucho menos de la confianza de todos los consumidores, las horas de entrega y las devoluciones.
De ahí que según Florencio García, director del sector retail para España en Kantar Worldpanel, "aunque el ecommerce en España crezca ligeramente por encima de la media global, su peso es todavía muy bajo en comparación con otros países cercanos". Razón por la que, a su juicio, "el potencial para el ecommerce en España es enorme".
Mercadona, Amazon y el resto
Un potencial que España podría empezar a ver en 2018 gracias al empuje que previsiblemente tendrá en las ventas online del gran consumo la nueva web de Mercadona, junto con el incremento de la presencia de Amazon y los planes de los demás operadores de la distribución para este canal. Un incremento que ya se observó durante el último año, cuando el gasto online en productos de gran consumo creció un 32% en España, siendo así un 1,8% del mercado español de dicho sector envasado, ante el 1,4% de un año antes.
Los datos de la consultora indican que un 26% de los hogares españoles hizo alguna compra de alimentación, droguería o perfumería a través de Internet entre abril de 2016 y marzo de 2017, frente al 22% que lo hizo el año anterior. Además, revelan que ha aumentado la frecuencia de compra en este canal, de 3,1 a 3,7 compras anuales, mientras que el ticket medio se ha reducido en 2,4 euros hasta los 43,4.
"A medida que Internet se convierta en un canal más habitual para llenar la despensa, y deje de ser un lugar para compras esporádicas, las dinámicas de compra se irán acercando a las de la cesta offline, donde el ticket medio es inferior porque se compensa con más rutina", comenta Florencio García. Al final del año, cada hogar había gastado 158 euros en hacer la compra online, 15 euros más que el ejercicio anterior.
La progresión del ecommerce en España es sin embargo inferior a la que el segmento experimenta a escala global. Y es que a nivel mundial el ecommerce creció un 30% y supuso un 4,6% del mercado global del gran consumo envasado. Corea del Sur, con un 19,7%, y Reino Unido, con un 7,5%, siguen liderando las ventas online, mientras que el crecimiento de China (6,2%) y Taiwán (5,8%) las sitúa como tercer y cuarto país, respectivamente, con más presencia del ecommerce, por delante de Francia (5,6%).
Menos fuerza en Europa
En un análisis más detallado, los datos de Kantar indican que Europa sigue siendo un continente dividido en cuanto a la cuota de penetración del comercio online. Con un 5,6% de cuota, el Viejo Continente es el segundo mayor mercado en el mundo después de Asia. Sin embargo, mientras Reino Unido y Francia siguen en cabeza con un 7,5 y un 5,6% respectivamente, otros países como Alemania (1,7%) o Países Bajos (2,6%) siguen muy detrás de esas cifras. Asimismo, el informe detecta señales de que el comercio electrónico se está ralentizando donde está más desarrollado, como Reino Unido o Francia, que a pesar de crecer, lo hacen a un ritmo inferior que en años anteriores.
Aún así, las previsiones de Kantar Worldpanel muestran que las ventas online del gran consumo generarán 170.000 millones de dólares a nivel mundial en 2025, lo que supondrá un 10% de cuota de mercado para el canal online. Algo que se dará especialmente en las grandes ciudades, criaderos naturales para el ecommerce. En Londres, Pekín o Shanghái, el 10% del gasto en gran consumo ya se hace a través de este canal.