Ocio de conveniencia o de experiencia. Éstas son las dos tendencias que imperan en el sector de los centros comerciales en nuestro país. Según explica Javier Hortelano, presidente de la Asociación Española de Centros Comerciales (AECC), el consumidor español se siente atraído bien por centros más pequeños y de carácter más urbanita, en los que siempre ha de haber espacio para la hostelería, bien por centros o parques más grandes en los que además de la oferta de alimentación -con un súper o híper en su interior- se ubiquen comercios de diversa índole, incluida la cultura y la restauración. "Los centros apuestan por la diversidad y por la hostelería, puesto que gracias a ella pueden ofrecer una experiencia de compra diferencial y diferenciarse así de otros canales de distribución", sostiene Hortelano, quien prevé un cierre de año positivo para el sector en nuestro país. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Alimentación
Según los cálculos del presidente de la AECC, los centros y parques comerciales de España -que actualmente dan trabajo a 720.000 personas, entre empleos directos e indirectos- cerrarán con un incremento en sus ventas de un 3 por ciento, con respecto a 2016, cuando su facturación alcanzó los 49.000 millones de euros. Esto significa que, si sus cifras son correctas, el sector superará los 50.000 millones de euros de facturación al cierre de este año.
Un año en el que la inversión también ha mejorado respecto del anterior. Si en 2016 el sector recibió la inyección de 2.000 millones de euros de inversión, al término de este año esa cantidad se habrá incrementado en 500 millones, hasta los 2.500 millones de euros. Inversiones que han servido para la puesta en marcha de nuevos centros comerciales, como el que está a punto de abrir sus puertas en la zona de Madrid Río de la capital española -Plaza Río 2-. No sólo eso. Esas inversiones también están sirviendo para remodelar algunos centros que se habían quedado anticuados o no respondían a las necesidades del consumidor post crisis. Un buen ejemplo es el centro Sambil Outlet de Leganés, en la Comunidad de Madrid.
En total, cuando acabe 2017, España habrá incorporado cinco nuevas unidades, entre los nuevos y los remodelados -dos en Madrid, uno en Sevilla, uno en Barcelona y uno en Las Palmas de Gran Canarias-.
19 proyectos en tres años
A todos ellos se sumarán, según los datos de Hortelano, más de 10 en los próximos dos años. "Entre 2017 y 2019 esperamos que se pongan en marcha 19 nuevos proyectos entre aperturas y reformas", sostiene.
Según el directivo, esas reformas "no sólo pasan por renovar, transformar y en algunos casos ampliar los centros para satisfacer las necesidades del consumidor del siglo XXI, sino por dar entrada a los operadores líderes que están creciendo y quieren establecerse en el mercado; por acomodar espacios de vida y de convivencia para que los consumidores se sientan cómodos; por integrar las nuevas tecnologías que ya usan los consumidores a la hora de hacer las compras. Nos enfrentamos a un consumidor más exigente, menos fiel a la marca, más informado, que toma decisiones muy rápido y muy virtual", sostiene.
Respecto de la competencia con Internet, Hortelano asegura que los centros comerciales "no compiten, sino que conviven con Internet". Eso sí, siempre y cuando sepan "aprovechar las ventajas que ofrece la tienda física y las nuevas tecnologías para comunicarnos con el cliente". En este sentido, el directivo también reclama una menor complejidad normativa para facilitar las tareas de los inversores que siguen apostando por el sector de los centros y parques comerciales en España. Actualmente, en España hay 17 legislaciones distintas, en función de la Comunidad Autónoma, que rigen cómo implantar y gestionar un centro o parque comercial.
Legislaciones que marcan el ritmo de evolución del sector. "De manera general, hay más centros comerciales en aquellas zonas que están a favor de la libertad de los consumidores", entendiendo por esa libertad la de horarios en el comercio, como Madrid, donde pese a ser una Comunidad Autónoma mucho más pequeña en superficie que muchas otras cuenta con 97 centros activos, siendo la segunda con mayor número de unidades en España, sólo por detrás de Andalucía, que suma 106, según datos de la AECC.