
Este verano será histórico para el Real Madrid. Florentino Pérez realizará el mayor desembolso en fichajes en sus más de quince años de mandato por culpa de una de las temporadas más mediocres que se recuerdan. Y no solo eso, ya que también se esperan registrar los mayores ingresos por ventas de jugadores. El dicho 'antes de entrar, dejen salir' se cumplirá a rajatabla en el club de Chamartín.
Por el momento, y casi sin despeinarse, el Real Madrid lleva ya gastados 95 millones de euros en Eder Militao (50) y Rodrygo (45). Dos jugadores que vienen a ocupar el banquillo blanco, a los que habría que añadir, como mínimo, los fichajes de un mediapunta, un delantero y un centrocampista. Todos de un nivel alto, lo que superaría con creces la inversión realizada en la temporada 2009/2010 de 258,5 millones de euros.
Pero antes de realizar esos fichajes tan costosos, el club debe deshacerse de jugadores que en estos momentos no parece que vayan a salir de una manera asequible. Los que llevan en duda durante casi toda la temporada han manifestado personalmente, o a través de su entorno, su deseo de continuar. Son los casos, sobre todo, de Bale, Marcelo e Isco. Tres jugadores que garantizarían millones y en consecuencia fichajes.
El resto de futbolistas también se mantienen implacables al hablar de su futuro, como son Mariano, Lucas, Vallejo, Reguilón o Brahim, aunque sus salidas serían menos complicadas. Y a esto hay que añadir a Kroos y Nacho, renovados la pasada semana, y Varane, que acaba de confirmar su continuidad para la próxima temporada. Nadie quiere salir y esto es un problema y de los gordos para el club.
Además, los malos resultados deportivos (el año con menos puntos en LaLiga desde el 2002 o el año menos goleador en lo que va de siglo) hacen que los grandes clubes europeos no tengan a los jugadores blancos entre sus miras. Futbolistas que además poseen altas fichas que pagar y contratos en vigor. Aún así, se espera que el Real Madrid supere los ingresos por ventas de la temporada 2018/2019, con 133,5 millones de euros.
Y es que el bajón de algunos jugadores es alarmante. Según el portal especializado Transfermarkt, Isco ha bajado 30 millones su valor de mercado hasta situarse en 60 millones. Bale ha pasado de 90 a 70 'kilos' y Marcelo ha disminuido un 50% su valor hasta colocarse en tan solo 35 millones de euros. Tres ejemplos de futbolistas que fueron importantes en la consecución de las últimas Champions. De todos los futbolistas del Real Madrid, ninguno supera la barrera de los 80 millones de euros, un dato más que significativo para los tiempos que corren. Sin duda, las oficinas del Bernabéu echarán humo durante el verano.