
La era José Mourinho en el Manchester United ha llegado a su fin. Tras su destitución como técnico 'red devil', el portugués termina su aventura en Old Trafford de dos campañas y media en la que ha invertido 466,1 millones de euros en fichajes (según Transfermarkt), ha recibido 115,9 millones en ventas y ha tenido un saldo ganador de tan solo tres título. Un pobre bagaje para uno de los clubes más históricos del viejo continente que continúa de capa caída desde el adiós de Sir Alex Ferguson.
El despido del entrenador portugués, ya ex United, deja un nuevo borrón deportivo en la historia del conjunto británico. El equipo nunca se ha dotado de un claro estilo de juego, las polémicas han ido cerrando filas sobre Mourinho y con tres títulos (todos en su primer año), significa la peor etapa del luso en un banquillo desde que dio el gran salto con el Oporto. Solo con el Chelsea, en su segunda aventura, el de Setúbal conquistó menos títulos (dos), pero es cierto que con los londinenses se llevó un gran campeonato (Premier League), mientras que como 'diablo rojo' el mayor trofeo fue una Europa League.
Junto al pobre balance deportivo, Mourinho también deja a un Manchester que ha realizado una enorme inversión económica en fichajes (empujado en parte por la creciente del mercado Premier). Desde el verano de 2016, cuando el de Setúbal llegó a Old Trafford, los dirigentes del club han invertido 466,1 millones mientras que solo han ingresado 115,9 por futbolistas traspasados. Una diferencia de 350,2 'kilos' más gastados que tampoco ha servido para formar un equipo compacto en defensa y ataque.
Con su llegada en la 16/17, el técnico completó cuatro fichajes de gran calibre Paul Pogba, Henrikh Mkhitaryan, Eric Bailly y Zlatan Ibrahimovic. Pese a que el sueco llegó libre desde el PSG, los 'diablos rojos' desembolsaron 105 millones en el francés para sacarle de la Juventus (el fichaje más caro de la historia en su momento), 42 en el armenio para tratar de cerrar filas en el centro del campo y 38 en el central que había brillado en el Villarreal. Por su parte, las ventas de Morgan Schneiderlin, Memphis Depay, Paddy McNair, Tyler Blackett y Will Keane solo dieron 47,15 millones a las arcas del club.
Un balance negativo en su primer año de 137,85 que sin embargo sí que sirvió al club para volver a la senda de los éxitos (no grandes, pero sí triunfos que se habían escapado anteriormente). Así, nada más empezar la temporada, 'Mou' se adjudicó la Community Shield contra el Leicester para después sumar durante la campaña la Copa de la Liga ante el Southampton y cerrar con la Europa League contra el Ajax. De esta forma, su primer año en Manchester iba a ser el más exitoso en lo deportivo, pero las sombras en lo económico iban a acabar haciéndose más grandes con los malos resultados de los siguientes ejercicios.
El declive de 'Mou'
Con la 17/18, el Manchester United quiso un nuevo salto en su regreso al éxito sobre el terreno de juego. Para ello invirtió 198,4 millones de euros repartidos en Romeu Lukaku (84,7), Nemanja Matic (44,7), Victor Lindelof (35) y Alexis Sánchez (34). El chileno protagonizó un curioso intercambio con Mkhitaryan y el Arsenal por el que los londinenses también pagaron 34 millones por el armenio y además, el United recibió 8,5 de la Real Sociedad por Adnan Januzaj y 3 del Valencia por la cesión de Andreas Pereira. En total un saldo negativo de 152,9 millones que no mejoró en los resultados tras caer en la Supercopa de Europa contra el Real Madrid, ser eliminado de Champions por el Sevilla y quedar segundo en liga tras su rival en la ciudad, el Manchester City, además de sucumbir en las dos copas británicas.
Tras su segundo año, las polémicas sobre su vestuario aumentaron y con el portugués cada vez más criticado, este último verano los 'red devils' invirtieron la 'escasa' cifra de 82,7 millones (Mourinho cargó contra la directiva por no hacer frente a sus deseos). Estos fichajes se repartieron en 59 por el brasileño Fred, 22 por Diogo Dalot y 1,7 por Lee Grant. Por ende, su mejor balance en los traspasos por los 23,35 'kilos' recibidos en ventas (16 por Daley Blind y 7,35 por Sam Johnstone), no terminaron de levantar el ánimo de un equipo en declive.
La eliminación en Copa de la Liga ante el Derby Country de Segunda División, los irregulares resultados de Premier League que solo le han llevado a la sexta posición, muy lejos del título y casi fuera de los puestos europeos, y las continuas polémicas con Pogba, otros pesos pesados, la directiva, leyendas del club y prensa, han acabado por costarle el puesto. En esta casi media temporada, Mourinho solo se ha salvado por su clasificación para octavos de Champions (el nuevo entrenador se las verá con el PSG), pero la directiva ha decidido dar un giro radical antes de que sea demasiado tarde.
Así finaliza la era José Mourinho en Old Trafford. Una etapa marcada por un balance negativo de 350,2 millones de euros más gastados que ingresados en traspasos y tres únicos títulos, ninguno de gran peso, que no hace otra cosa que agudizar la crisis del Manchester United. El club más laureado de Inglaterra continua en declive desde que su histórico Sir Alex Ferguson decidiese dejar el banquillo en 2013 cuando levantó la, hasta ahora, última Premier League para los 'diablos rojos'.