
El Gobierno de Hong Kong impedirá a la filial de ACS, Leighton, licitar obras públicas durante un periodo de un año por los "problemas de construcción" en la estación de metro de Hung Hom. Las obras han registrado un importante retraso además de un sobrecoste que podría alcanzar los 1.100 millones. Habitualmente, las suspensiones se limitan a seis meses, pero en este caso la sanción adoptada por las autoridades ha sido del doble.
El cruce fronterizo entre Hong Kong y Shenzhen se retrasará previsiblemente hasta mediados del próximo año por los problemas laborales registrados por Leighton Contractors, tal y como recoge el diario South China Morning Post, que informa de las sanciones para otros tres contratistas.
La española además tendrá otra sanción adicional de tres meses por las obras del Centro de exposiciones que albergará este metro y que entrará en vigor después de que finalice su prohibición de 12 meses por el trabajo de Hung Hom.
Leighton es el contratista principal en el edificio de la terminal de pasajeros en el cruce fronterizo de Liantang-Heung Yuen Wai.
En marzo de 2013, la compañía ganó un contrato para ampliar las instalaciones del centro de Kowloon, pero luego se descubrió que el trabajo era deficiente, lo que provocó una investigación policial.
El departamento responsable no especificó exactamente qué trabajo defectuoso había llevado a esta decisión, pero el Departamento de Carreteras indicó el pasado mes de julio que las paredes de la nueva plataforma se desviaban de los diseños aprobados y que no se habían instalado 2.000 acopladores metálicos para conectar barras de acero, tal y como recoge South China Morning Post. Las cifras, no obstante, siguen en el aire, ya que se podrían elevar hasta las 5.000 barras, lo que supondría el 20% de la instalación.
Se podría demoler parte del proyecto para testar si la construcción está poniendo en riesgo la seguridad pública
Por su parte, el Gobierno de Hong Kong está listo para demoler parte del proyecto ferroviario para averiguar si los trabajos de construcción ponen en riesgo la seguridad pública. La decisión se tomará en función de un informe que se está preparando por parte de MRT Corporation y que se espera que se conozca este mismo mes. Esta misma corporación aseguró en junio que las obras estaban correctas y en julio indicó que faltaban estas 2.000 barras sin la aprobación del Departamento de Construcción, pese a que sus inspectores habían certificado la obra en 2017.
El Parlamento además ha abierto una comisión para investigar la situación por la que se espera que comiencen a testificar las partes a partir del 22 de octubre y, previsiblemente, hasta finales de diciembre no tendrá listo su informe.
El proyecto global de 33.700 millones de dólares de Hong Kong se presupuestó originalmente en 25.000 millones.
Samsung C&T Corporation y Hsin Chong Construction Company, firmas en una empresa conjunta para construir dos estaciones en el enlace ferroviario, han recibido una prohibición de cuatro meses para licitar por los problemas encontrados en To Kwa Wan.
Obras con sobrecoste
ACS ha convertido en un auténtico negocio las reclamaciones patrimoniales al Estado. La compañía que preside Florentino Pérez y sus socios mantienen reclamaciones que ascienden a entre 1.754 millones y 2.194 millones de euros por la construcción de infraestructuras, que en la mayoría de los casos han resultado fallidas.
Florentino Pérez ya logró cobrar más de 1.400 millones de euros con el abandono del almacén de gas Castor, que además de haber casi triplicado sus costes originales (estaban previstos 600 millones y acabó costando casi 1.750 millones) generó también más de 500 terremotos en las provincias de Castellón y Tarragona en su intentona de puesta en funcionamiento.
La compañía del presidente del Real Madrid -una de las mayores empresas de infraestructuras del mundo- reclama junto con otras constructoras 1.116 millones por las radiales de Madrid, ya que estas carreteras no lograron el tráfico previsto por el Gobierno por culpa de la crisis económica.
ACS exige una indemnización de 600 millones de euros también por una desaladora que costó cinco veces menos y que ahora podría llegar a un acuerdo de venta por 160 millones con el Gobierno de Murcia. A esta cantidad se añaden los 28 millones que la constructora mantiene como reclamación por los sobrecostes del AVE en Granada y, por último, la deuda de TP Ferro, la sociedad que los Gobiernos español y francés han tenido que intervenir para poder mantener el servicio entre ambos países y que supera los 557 millones de euros.
Leighton, por el momento, no ha hecho ningún comunicado oficial sobre la situación de la obra en la estación del metro de Hung Hom.
Negocia comprar a Apollo el resto de Ventia por 1.000 millones
ACS, a través de su filial australiana Cimic, está negociando la compra del 50% de Ventia por cerca de 1.000 millones de dólares. La operación supondría hacerse con la participación que posee en estos momentos el fondo Apollo que cuenta con el asesoramiento de Credit Suisse para esta operación. Ventia nació el pasado 2015 de la integración de Leighton Contractors, Thiess Services, Vision Stream, Chargepoint, Imatis Australia y Delron. La compañía cuenta con 6.400 trabajadores y su función se basa en ofrecer servicios a empresas de telecomunicaciones, mantenimiento de túneles y autopistas, así como de instalaciones eléctricas. Apollo lleva más de un año buscando compradores para esta participación por la que se interesó en su momento Brookfield. Ventia además habría estado mirando también una operación de compra para ganar tamaño: Adexum's Enviropacific, dedicada a la gestión de suelos contaminados.