
El Gobierno quiere favorecer el acceso de los jóvenes a la primera vivienda y para ello en el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 ha propuesto recuperar las ayudas a la compra, tanto de VPO como libre para jóvenes, después de que el anterior plan (2013-2016) las eliminara y apostara solo por el alquiler y la rehabilitación. | Más noticias en el suplemento gratuito elEconomista Inmobiliaria.
Las ayudas son bienvenidas por una parte del sector inmobiliario, pero en todo caso, la mayoría de los expertos apuntan a que son insuficientes en un contexto de elevados precios de la vivienda. Así, consideran que lo único que promueven son compra en mercados secundarios, por lo que se expulsará a los jóvenes a las zonas de la periferia.
Concretamente, la ayuda va enfocada a los menores de 35 años que tengan ingresos inferiores a tres veces el indicador público de renta de efecto múltiple, Iprem, (19.170 euros anuales en 12 pagas) que serán los que podrán beneficiarse de hasta 10.800 euros con el límite del 20% del precio de compra. Además, debe cumplir otros requisitos para beneficiarse de estas ayudas como que la casa que compre sea su vivienda habitual y permanente durante al menos cinco años y que no sea propietario de otro inmueble en nuestro país
Este Real Decreto acaba de iniciar sus trámites en este mes de junio y se prevé que entre en vigor el 1 de enero de 2018. Después del anuncio de dichas ayudas por parte del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, muchas han sido las reacciones en el sector.
Mikel Echevarren, consejero delegado de la consultora Irea, explica que "la medida propuesta por el gobierno para dar a determinados compradores potenciales una ayuda para facilitar el pago del 20%, es una propuesta constructiva para ese colectivo concreto. Por la cuantía de la ayuda que se ha propuesto solo tendrá efecto dichas ayudas en ciudades o áreas donde las viviendas se vendan en torno a los 100.000 euros, aproximadamente. Se trata por lo tanto de una medida de impacto parcial que tendrá sus efectos sobre todo en mercados secundarios y en áreas metropolitanas de poder adquisitivo bajo de las principales ciudades".
En esta misma línea, Maurice Kelly, director de Residencial y Suelo de JLL, afirma que "puede que esta medida sirva de ayuda a una minoría que disponga de ahorros suficientes para asumir el 20% del precio de venta más los gastos asociados a la compraventa. Decimos minoría, porque para los jóvenes resulta muy difícil destinar gran parte de sus bajos ingresos para reunir la cantidad suficiente para afrontar la compra de una casa, máxime cuando uno de los requisitos a cumplir para pedir la ayuda es tener ingresos mensuales inferiores a 1.597 euros y anuales menores de 19.170 euros".
Endeudamiento
Desde Alquiler Seguro consideran que la medida "es desafortunada, porque volvemos al paradigma pasado y equivocado de incentivar la compra de una vivienda". La firma asegura que "las demandas de los jóvenes ya no son las de antes, ahora prima el pago por uso, frente a la compra, además, el trabajo o las circunstancias familiares, exigen cada vez más movilidad, por lo que cualquier medida que implique fomentar la compra a menores de 35 años, es una barbaridad. Que un joven compre una vivienda, significa que le estamos apalancando 35 años con una hipoteca y esto es su muerte financiera. Lo realmente necesario es que nos adaptemos a las necesidades actuales y solo podemos hacerlo concediendo a los jóvenes ayudas para el alquiler, que les concederá flexibilidad y no apalancamiento".
Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista califica el nuevo plan de decepcionante por varios motivos. "Por una parte recurre de nuevo a viejas fórmulas con la puesta en marcha de ayudas a los jóvenes para la compra de una casa generando la falsa expectativa de que todo el mundo debe ser propietario. Además, incentiva otra vez el endeudamiento masivo por parte de los más jóvenes".
El directivo considera asimismo que "perjudica gravemente a aquellas personas mayores de 35 años -y que ganen más de 19.170 euros al año en 12 pagas o 22.365 euros en 14 pagas- que no pueden acogerse a esta ayuda ya que no contarán con la extra del Gobierno y se enfrentarán a una subida de precios provocada, precisamente, por esa ayuda gubernamental".
Pero no todo son críticas al plan, ya que desde el sector promotor se celebra que se hayan recuperado las ayudas a la compra de vivienda, que además en esta nueva etapa "pivotan sobre las personas y no sobre la vivienda", destaca Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes.
"Cualquier ayuda del Estado pensanda en las personas es positiva. El plan supone una oportunidad de cambio, un apoyo para un mejor acceso a la vivienda. Las ayudas siempre son útiles. En mayor o en menor medida".
Por otro lado, el directivo apunta que "la mayor petición que podemos hacer al Gobierno es que eviten las interferencias que limitan o, en algunos casos -como el del urbanismo-, imposibilitan el normal funcionamiento del mercado inmobiliario. Por lo tanto, preferiría mucho más que destinaran los recursos a eliminar esas tremendas trabas regulatorias y burocráticas que existen hoy en día y que tanto daño han hecho al mercado inmobiliario español".