
Torres ha finalizado la construcción de su nueva bodega en la comarca de Les Garrigues (Lleida), que ha recibido una inversión de 3,8 millones de euros. La instalación -con una superficie de 1.800 metros cuadrados- se dedicará a la producción del vino Purgatori, un tinto de gamma alta elaborado con variedades mediterráneas como la garnacha y la cariñena y enfocado principalmente a la exportación.
En declaraciones a elEconomista, el director general de Torres, Miguel Torres Maczassek, ha destacado que la nueva bodega se ubica en la denominación de origen (D. O.) Costers del Segre, en una zona de clima continental, con una gran variedad de temperaturas y un clima seco, lo que provoca una maduración lenta de la uva y permite la elaboración de vinos de gran intensidad aromática.
La familia Torres empezó la producción de uva en la D. O. Costers del Segre en 1999 y actualmente cuenta con 200 hectáreas de viñedo ecológico en esta región vitivinícola, repartidos entre el valle y las laderas, que alcanzan los 550 metros en su punto más alto. Esta es la quinta bodega de Torres en Cataluña y se suma a las tres del Penedès y la del Priorat.
La denominación de Purgatori -tanto para la bodega como para el vino- es un homenaje de Torres a los monjes de Montserrat que habitaron la masía a partir del año 1770 para cultivar la tierra y proveer de alimentos a la diócesis. La bodega conecta con la antigua cava subterránea donde estos primeros residentes elaboraban y guardaban su vino y también se ha rehabilitado parte del edificio histórico, convirtiendo en sala de catas el espacio que los monjes utilizaban como comedor.