
Neinor Homes ha comenzado el curso con los deberes hechos. La promotora que nació de la rama inmobiliaria de Kutxabank, y que adquirió el fondo norteamericano Lone Star, ha superado en septiembre los objetivos que se fijó al término de 2016.
El consejero delegado de la firma, Juan Velayos, aseguró que el mes pasado ya tenían más de 500 millones de euros en preventas, 160 millones más de los que facturó durante todo 2015. Velayos aseguró que Neinor tiene un valor que supera los 1.000 millones de euros y que tienen más de un millón de metros cuadrados edificables, unas 10.000 viviendas.
El consejero delegado no tuvo duda alguna en afirmar que "somos el jugador que lidera el sector". De hecho, de las 38 promociones que tienen en comercialización, "más de la mitad ya están vendidas", desveló. Neinor tiene un 25% de su valor en inmuebles en Cataluña, a pesar de que en un inicio se centraron más en el País Vasco. Velayos explicó que sus promociones catalanas están funcionando "más que bien".
La bolsa puede esperar, el suelo no
Aunque por ahora no se plantean salir a bolsa, saben que ese es su destino final, pero Velayos descarta el salto hasta "que no lo exija el mercado".
Donde sí se plantean ir es a otras zonas donde ahora no están, como Málaga o incluso Girona. Esto se debe a la revalorización del suelo, que según datos internos, registra alzas de cerca del 8%. En opinión de Velayos, la subida de precios que ya se experimenta en ciudades como Barcelona y su primera corona metropolitana, se extenderá a otras provincias catalanas como Tarragona o Girona. De hecho, Velayos confesó que su firma está haciendo una apuesta muy fuerte en Córdoba.
El futuro del sector
El ex consejero delegado de Renta Corporación también aseguró que prevé una ola de fusiones en el sector, y recibe con los brazos abiertos todos los nuevos competidores que puedan venir.
En cuanto a perfiles de comprador, alerta de la llegada de diferentes inversores patrimoniales, uno de ellos peligroso, ya que especula con la venta del inmueble, incluyendo el alza del precio y contando que supere el primer pago.Después hay otro que les gusta, que es el que busca la inversión inmobiliaria como valor refugio.
En todo caso, Velayos asegura que prefieren vender a finalistas, por lo que su perfil de comprador son parejas con hijos que adquieren su primera vivienda tras un periodo de alquiler.La obra nueva no puede competir con la de segunda mano si no tiene lo que se exige en un inmueble del siglo XXI, así de contundente razonaba Velayos, que cree que lo que marca la diferencia es el extremado cuidado y la sostenibilidad.
Si entre el 1992 y 1998 se edificaban 200.000 viviendas por año y entre 1999 y 2008 se construían 500.000 inmuebles con picos de 700.000, Velayos asume que el actual ritmo de los últimos ocho años con entre 20.000 y 50.000 pisos por año tampoco es normal. El consejero delegado de Neinor explica que será estable y se va a duplicar, triplicar o cuadruplicar en los próximos años.