
Incógnita resuelta. BPI reveló ayer que la junta de accionistas extraordinaria en la que se votará el levantamiento del blindaje que pesa sobre sus derechos de voto se celebrará el próximo 22 de julio.
Su eliminación es una de las condiciones impuestas por CaixaBank en su oferta pública de adquisición de los títulos del banco luso.
Actualmente, ningún accionista de BPI, independientemente de la participación que ostente, puede votar por más de un 20 por ciento de los títulos de BPI. CaixaBank, que pretende con su oferta de compra obtener al menos el 51 por ciento del capital, siempre ha condicionado sus ofertas (tanto la actual como la de 2015) a la eliminación de esta limitación. No obstante, la convocatoria de la junta extraordinaria no asegura el éxito. La eliminación del blindaje debe contar con el apoyo de al menos dos tercios del capital (aproximadamente el 67 por ciento de los votos).
CaixaBank, que a 31 de marzo de este año controlaba algo menos del 45 por ciento de las acciones de BPI, necesita, por tanto, apoyo de otros accionistas para que se levante el blindaje. Además de la 'duda' sobre que hará Isabel dos Santos, según la prensa lusa, Violas Ferreira Financial, que controla un 2,68 por ciento de BPI y es el primer accionista portugués por representatividad, no apoyaba ni el precio de la oferta (1,113 euros), ni tampoco levantar los límites de voto.