Catalunya Banc se está convirtiendo en un pozo sin fondo para las arcas públicas. Los 12.052 millones de euros recibidos por la entidad durante su proceso de nacionalización no han sido suficientes para sanearla y el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) ha tenido que añadir otros 527 millones para colocar la cartera de hipotecas tóxicas que tenía la entidad.
La cifra es sólo un tercio de lo que inicialmente pidieron los compradores de esta cartera de préstamos hipotecarios de difícil cobro, pero incrementa el dinero público que se ha inyectado, directa e indirectamente, en la antigua caja de ahorros.
Esa cuenta negativa todavía podría incrementarse cuando se resuelva la subasta de la entidad, prevista para la semana que viene. Fuentes del Frob aseguraron ayer que el precio final de la oferta más competitiva será "positivo" para la entidad, si bien es preciso esperar a que lleguen todas las ofertas. "Esperamos la mejor oferta y confiamos en que tengamos el máximo precio posible", puntualizaron.
Sin embargo, para lograr ese precio positivo, el Frob estaría dispuesto a ofrecer al futuro comprador un sistema de garantías adicionales similar al que otorgó al venezolano Banesco cuando se hizo con Nova Caixa Galicia. En aquella ocasión el Frob garantizó activos por valor de hasta 1.000 millones, aunque el organismo público ha estimado la pérdida razonable en sólo 270 millones.
En el caso de Catalunya Banc, el Frob ofrecerá garantías para que el comprador no tenga que asumir la reclamación del banco malo Sareb por los activos traspasados y tampoco el grueso del coste por sentencias sobre preferentes, cláusulas suelo o coberturas de tipos de interés (swaps). El Estado asumirá también el coste que pueda tener para el vencedor de la subasta la ruptura del acuerdo de bancaseguro que Catalunya Banc tiene con Mapfre y el comprador podrá aprovechar los créditos fiscales del grupo.
Aunque en el Frob no quieren desvelar a cuánto pueden ascender finalmente estas nuevas ayudas, dan por hecho que la Comisión Europea no pondrá pegas porque siempre sería menor que el coste de liquidar Catalunya Banc que ascendería a unos 17.000 millones.
Sin segunda vuelta
Si todo transcurre según lo previsto por el Frob, hoy está prevista la recepción de cuatro ofertas que serán presentadas por Banco Santander, CaixaBank, BBVA y Société Générale. El organismo que dirige Antonio Carrascosa pretende evaluarlas durante el fin de semana. Si ninguna de ellas fuese lo suficientemente competitiva para ganar la adjudicación en primera vuelta, el Frob abriría el lunes una segunda vuelta para mejorarlas.
A más tardar el martes deberían estar analizadas todas las ofertas y el Frob estaría en disposición de elegir la más competitiva y proceder a su adjudicación. "Siempre es deseable no llegar a la segunda vuelta", indicaron las citadas fuentes, si bien recordaron que en otras subastas la segunda vuelta ha servido para elevar el precio al que finalmente se adjudicó la entidad.
Respecto a los 572 millones adicionales que el Frob ha tenido que añadir para vender la cartera hipotecaría de Catalunya Banc, este organismo considera que es una inversión financiera "razonable" ya que debería repercutir al alza en el precio de las ofertas por el banco.