
La demanda de perfiles laborales digitales durante los meses de la pandemia se ha mantenido en Barcelona ciudad pero ha quedado prácticamente a la mitad de lo que es habitual.
Esta es una de la conclusiones del estudio que promueve Barcelona Digital Talent y que en esta su segunda edición ha detectado que entre los meses de marzo a mayo pasado se han publicado más de 6.700 ofertas de trabajo digitales en Barcelona, lejos de las poco más de 12.000 que son habituales. No obstante, esta cifra está muy por encima de las siguientes categorías de puestos más demandados durante la crisis, como el gestión empresarial (management) y las operaciones financieras y de negocio, que registraron caídas en la demanda mucho más significativas, de entorno al 60%.
El informe demuestra que la demanda de perfiles digitales durante el confinamiento se ha intensificado en categorías laborales vinculadas con la gestión de la nube.
Respecto al conjunto de 2019, destaca la creación de empleo en este ámbito en Barcelona, con la suma de 9.600 profesionales digitales, un incremento del 14%, respecto a los ya existentes en 2018, de manera que a final del pasado año trabajaban en áreas TIC un total de 77.000 profesionales en la ciudad. Ello ha sido gracias en parte a la llegada de mano de obra del resto de España o del extranjero, en una cifra de 3.600 personas, es decir, el 50%, especialmente provenientes de Madrid, Londres y Buenos Aires.
A pesar del incremento en la oferta, Barcelona muestra una elevada bretxa laboral en profesiones digitales, de manera que, en los últimos dos años, la demanda de talento digital se ha incrementado en Barcelona en un 80% mientras que la oferta de profesionales digitales disponibles sólo ha crecido un 23%. Esta ratio es más importante en áreas como la ciberseguridad, el Big Data, la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas (IoT). A su vez, se ha detectado más demanda de expertos en Blockchain y Computer Vision.
Aunque está tensión entre oferta y demanda podría hacer pensar que las retribuciones en el segmento TIC son elevadas, Barcelona no es de las ciudades que mejor paga a sus profesionales digitales. La media de salario es ahora de unos 37.500 euros al año, que si bien es superior a la media salarial de España que está en 30.800 euros, sigue a mucha distancia de los 73.000 euros que puede cobrar un experto digital en Londres.
Según el informe, España muestra déficit en generación de talento y excelencia académica. España, con más del 9% de la población de Europa, sólo cuenta con el 6,6% del talento digital (323.000 profesionales). En cuanto a la movilidad, destaca un balance positivo en los flujos de talento tecnológico: el país atrae el 8,5% de la movilidad de talento tecnológico en la UE y sólo exporta el 4,3% de total talento tecnológico hacia fuera de la UE.
El director del programa de Talent Digital de Mobile World Capital Barcelona y portavoz de Barcelona Digital Talent, Jordi Arrufí ha indicado durante la presentación del informe que "esta brecha digital también va acompañada de una desigualdad en la paridad de género". La proporción de mujeres que trabajan en posiciones digitales en Barcelona es del 26,5%. Aunque la cifra crece respecto al año pasado (22%) y es ligeramente superior a la media europea (25,1%), el porcentaje muestra un amplio margen de mejora. La única área de conocimiento digital en la que paridad de género es en especialistas en Experiencia de Usuario (UX) para productos digitales con un 51% de mujeres.
Los empresarios piden formación
Recientemente, los empresarios reclamaron que se intensificara la formación en áreas digitales. Des de la patronal Foment del Treball se advirtió que con la crisis sanitaria las empresas se encuentran con muchas dificultades para conseguir las personas adecuadas con la formación, recursos y habilidades necesarias para dar respuesta a las actuales necesidades del mercado de trabajo.
Por este motivo, Foment del Treball –que representa a la práctica totalidad de los sector productivos y económicos de Cataluña- propone que las administraciones públicas, en coordinación con las empresas, impulsen programas de formación en recursos y habilidades digitales y, a la vez, se promocionen las vocaciones STEM –ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas- que registran una continuada tendencia a la baja, según registran las universidades de Cataluña. Estos programas tendrían que ser, además, una gran oportunidad de reincorporación al mercado para personas que han perdido el trabajo durante la crisis por la COVID 19.