
La basílica de la Sagrada Familia de Barcelona ha presentado este jueves los terminales que coronarán las cuatro torres de los evangelistas, cuya finalización está prevista para 2021 y que se levantarán hasta 135 metros de altura.
Estas cuatro torres estarán rematadas con esculturas aladas de mármol y hormigón blanco de los animales que representan a cada evangelista, obra del escultor Xavier Medina Campeny: un ángel para Mateo, un león para Marcos, un buey para Lucas y un águila para Juan.
También en 2021 se completará la torre de la Virgen, coronada por la estrella matutina, y en 2022 se coronará la torre de Jesús con una cruz de cuatro brazos que irradiará luz y alcanzará los 172,5 metros de altura.
Actualmente, las torres de los evangelistas se encuentran en el noveno nivel de los 13 que tendrán, y la de María en el décimo quinto de los 19 que debe tener. Todas superan ya los 100 metros de altura.
Con estos planes se sigue el objetivo de completar la construcción del templo en 2026, si bien quedará un aspecto pendiente de negociar con el Ayuntamiento de Barcelona: los voladizos y la escalinata de la fachada de la Gloria, que requieren autorización porque invaden la calle Mallorca. En el caso de las escaleras, incluso supone derribar edificios.
Las negociaciones empezarán en breve, tras las fiestas municipales de la Mercè de la próxima semana, según lo acordado entre el consistorio de Ada Colau y la Junta Constructora de la Sagrada Familia cuando rubricaron en julio el acuerdo que otorgó la licencia de obras al templo, tras 130 años en construcción, según ha explicado el presidente delegado de la Junta Constructora de la Sagrada Família, Esteve Camps.
En 2026 también quedará por completar el conjunto escultórico previsto para decorar la fachada de la Gloria, compuesto por más de un centenar de figuras y para el que ya se preparan los pliegos del concurso para realizarlas. Según los planes de Gaudí, debe representar una Biblia en piedra, en tres niveles, que debe atraer a los no creyentes.