
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha advertido este lunes en el Fórum Europa de que las centrales térmicas de carbón "tienen poco recorrido" y estimó que su funcionamiento "difícilmente llegará a diez años".
Así se ha expresado Ribera en este evento organizado por Nueva Economía Fórum, donde ha mostrado su preocupación ante "la falta de anticipación" de las zonas donde se ubican estas centrales para buscar alternativas. "Es dramática", ha denunciado.
A este respecto, ha recordado que existe "un marco comunitario que me viene dado" que obliga a los titulares de las centrales a cumplir ciertas obligaciones medioambientales o a cerrar, informa Servimedia.
"Cada titular debe hacer sus cuentas y presentar sus propuestas", ha apuntado Ribera, quien ha señalado que el Gobierno, en función de aspectos como la seguridad de suministro, debe autorizar o no el cierre de dichas instalaciones.
En todo caso, ha expresado su compromiso de hablar con los alcaldes y trabajadores afectados por estos cierres que, según ha advertido, suponen "un monocultivo" para algunas zonas, y de buscar soluciones que permitan "la recuperación de un futuro industrial y económico con actividades que permitan que la gente pueda seguir viviendo donde vive con condiciones adecuadas".
En cuanto al futuro de las centrales nucleares, ha señalado que la decisión programática del PSOE de no prolongar su vida útil, lo que supondría el cierre total de estas instalaciones en España en 2028, "es una referencia importante".
Sin embargo, ha apuntado que todavía no se puede tomar una decisión ya que falta información como la que aportarán los escenarios de descarbonización previstos para 2030 y 2050, que formarán parte del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima que el Gobierno quiere aprobar antes de que concluya 2018.
En la misma línea, ha indicado que también es necesario, para determinar el futuro de las nucleares, contar con un Plan actualizado sobre las nuevas obligaciones de seguridad en la gestión de los residuos radioactivos.