Unicaja y Caja España-Duero tienen ya cerrado el modelo para su integración. El banco de la entidad andaluza absorberá al de la castellana en una operación que se aprobará en febrero.
El Banco de Unicaja absorberá al de Caja España-Duero, según publica en su edición Diario de Valladolid El Mundo. Las dos entidades han concluido ya el proyecto de fusión, que será sometido en el mes de febrero a los consejos de administración de ambos bancos e inmediatamente después a sus juntas generales de accionistas, es decir a los consejos de ambas cajas.
La consultora Uría Menéndez ha recomendado que el Banco de Caja España de Inversiones Salamanca y Soria S.A. se integre en Unicaja Banco S.A. y cree un sistema de protección institucional (SIP). Aún no se ha decidido el nombre del nuevo banco. La cuota de poder de las dos entidades será la pactada en el protocolo de fusión y Unicaja se alzará con el 70 por ciento y Caja España-Duero el 30.
La consultora Uría Menéndez habría recomendado la fórmula de fusión por absorción por las ventajas fiscales que aporta, como exenciones en el impuesto de trasmisiones, deducciones por las inversiones en la obra social, además de no repercutir el IVA en la operación.
Las dos cajas, que no descartan entrar en una nueva fusión, desechan así la fórmula prevista inicialmente, que era la fusión de sus dos bancos para crear un tercero, que sería el operatico. La complejidad y el fracaso de este modelo en Bankia y La Caixa son dos de las razones por las que se habría desaconsejado finalmente.
La sede social estará en la capital malagueña y la operativa ocupará las oficinas de la sede de la antigua Caja Duero en la calle Marqués de Villamagna de Madrid.
Por otro lado, las dos entidades tienen ya perfilado su plan de ajustes laborales, que supondrá la salida de 1.000 empleados, de los que 300 corresponderían a la castellana.
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