El 51 por ciento de los empresarios leoneses tiene una opinión negativa del proceso de fusión de Caja España-Duero con Unicaja.
La encuesta "Confianza empresarial ante el 2012", elaborada por el Círculo Empresarial Leonés (CEL), refleja que el 51 por ciento de los directivos leoneses tiene una opinión negativa del proceso de fusión de Caja España-Duero con Unicaja.
Las valoraciones positivas sobre la fusión han ido descendiendo desde que se inició el proceso entre Caja España y Caja Duero en 2009, año en el que el apoyo era del 67 por ciento, mientras que en el 2010 la aceptación fue del 30 por ciento y ahora apenas alcanza el once por ciento.
Por otro lado, casi seis de cada diez empresarios leoneses opina que el actual ordenamiento territorial de Castilla y León perjudica los intereses empresariales de la provincia, frente al 34 por ciento que piensa que no le afecta.
El 58 por ciento de los empresarios leoneses considera que la organización administrativa de Castilla y León perjudica al desarrollo empresarial en la provincia y existe una percepción bastante generalizada de que persisten desequilibrios territoriales entre las distintas provincias de la Comunidad y disparidad de oportunidades entre cada una de ellas.
Así se refleja en la Encuesta de Confianza Empresarial 2012, un estudio realizado a partir de una muestra de unos 150 representantes de todos los sectores y ámbitos geográficos de la provincia.
El 34 por ciento de empresarios leoneses piensa que a la provincia no le afecta la organización administrativa de la Comunidad, es decir, que este hecho no interfiere en los resultados empresariales, mientras que un cuatro por ciento considera que es beneficioso para León y otro cuatro por ciento no se pronuncia al respecto.
Las respuestas negativas han disminuido respecto al año anterior, al pasar del 66 por ciento al 58 por ciento actual, aunque también han decrecido las opiniones positivas desde el siete por ciento del pasado año hasta el cuatro por ciento del actual.
El número de empresarios que manifiesta que la influencia de la división administrativa en los resultados de las empresas es nula ha aumentado del 27 por ciento del pasado año al 34 por ciento del actual.
Las valoraciones sobre esta cuestión habían empeorado en 2011 respecto a las obtenidas en el sondeo de 2010, cuando parecían confirmar una cierta tendencia iniciada en 2009 a favor de la actual división territorial de la Comunidad. En la encuesta de 2012 vuelven a manifestarse las dudas que genera esta cuestión entre los empresarios leoneses, que no encuentran suficientes razones para creer que León sale beneficiada del actual ordenamiento.
Por sectores, la construcción (80 por ciento) y el comercio (70 por ciento) son los más críticos con la división administrativa de Castilla y León y arrojan un contundente porcentaje de descontento.
La construcción vuelve a ser la actividad que más cuestiona el aspecto territorial de la Comunidad y el comercio pasa a estar entre los más críticos, cuando en el año anterior había sido de los más benevolentes con un 13 por ciento de representantes que consideraba positivo el actual orden territorial. En cuanto al sector industrial, hay un 59 por ciento de encuestados que opina que este hecho no es vinculante para la actividad empresarial.
